Agencias -Guste o no, el cine moderno se podría dividir entre un antes y un
después de La Guerra de las Galaxias, debido a la gran importancia de esta
historia espacial, que entra el domingo en su última órbita.
Cuando la cortina caiga sobre la saga cinematográfica más exitosa de todos los
tiempos, la industria mostrará su división sobre si la lucha galáctica de George
Lucas entre el bien y el mal es el paladín de la industria cinematográfica, o su
azote.
Algunos sostienen que revolucionó a Hollywood debido a su éxito comercial sin
tener en cuenta el mérito artístico. Se dice que La Guerra de las Galaxias
empleó tecnología que socavó los principios fundamentales de la interpretación.
El boom de los efectos especiales y las aventuras galácticas En la
década de 1970 había considerables limitaciones para el rodaje de cintas de
fantasía y ciencia ficción, o incluso para epopeyas y cintas históricas, explicó
Lucas a The Associated Press recordando el inició de la saga. "No teníamos
los recursos necesarios", declaró.
Debido en parte a presiones económicas, muchos estudios habían cerrado los
departamentos de efectos especiales que en décadas previas habían permitido la
filmación de aventuras históricas y cintas del "otro mundo". En una situación
como esa, los planteamientos de Lucas debieron parecer demasiado revolucionarios
a los ejecutivos de la United Artists y Universal que rechazaron invertir en una
película galáctica. Finalmente Twentieth Century Fox aposto por el proyecto
invirtiendo 11 millones de dólares.
"Era como tratar de pintar cuadros sin pinceles", dijo Lucas. "Yo
traje de vuelta el pincel y les dije: '¿Saben ustedes? Con esto pueden hacerse
muchas cosas... Es algo que en mi opinión tiene una gran fuerza'. Y creo que
traer de vuelta (los efectos especiales) fue el mayor de todos esos efectos".
Para Lucas el éxito de la Guerra de las Galaxias "permitió hacer todo
tipo de películas que estaban como restringidas porque eran demasiado caras. Eso
no quiere decir que las películas de efectos especiales no sean caras, pero son
mucho más baratas que si uno tratase de hacerlas a la antigua y pusiese a 10.000
personas en mitad del desierto con vehículos para la distribución de comida y
todas las otras cosas que se deben tener".
"En cierto grado, Lucas inventó el filme de efectos especiales," dijo
Leonard Maltin, crítico de películas de Entertainment Tonight. Aunque
afirma que ya se habían producido desde el principio de la industria filmes que
usaban todos estos recursos, le otorga a Lucas el haber sido el creado de "una
industria de los efectos especiales, y los filmes donde lo principal eran los
efectos eran inusuales". Los críticos también le otorgan otro
reconocimiento especial a Lucas, el haber convertido el sonido en un elemento
clave en las películas. Tomando la partitura escrita por John Williams la
introdujo en el filme dándole una fuerza extraordinaria. Lucas "entendió que
el sonido era tan poderoso como la imagen" señalo un critico seguidor de los
filmes del director prodigio. La dependencia que tiene Lucas de los efectos
especiales molesta, sin embargo, a algunos cinéfilos, especialmente en la
segunda trilogía donde las imágenes creadas por computadora fueron usadas tan
excesivamente que los actores trabajaron la mayoría del tiempo ante unas
pantallas, con el fondo añadido después.
Los espectadores volvieron al cine
Cuando
la primera película se estrenó en el Teatro Chino de Hollywood el 25
de mayo de 1977, los aficionados hicieron largas filas para comprar sus
estredas pese a que nadie esperaba que la producción fuese un éxito taquillero y
mucho menos los estudios que habían rechazado entrar en el proyecto.
“Yo no podía creer lo que veía”, recuerda Mark Hamill, quien
interpreta a Luke Skywalke. El crítico cinematográfico y escritor Mark
Cousins cree que "Con la Guerra de
las Galaxias volvió el asombro al cine," dijo "Los aficionados del
cine son humanos y quieren emoción". Y las
cifras son irrefutables, la saga de seis películas atrajo a millones de nuevos
espectadores a las salas cinematográficas de todo el mundo, reconociendo el
poder de la película.
"La guerra de las galaxias", fue en 1977 la mayor sensación taquillera
de su época. "La guerra de las galaxias" superó incluso a "Tiburón" de Steven
Spielberg para constituirse en el coloso de las superproducciones modernas.
Contando las reposiciones y las versiones especiales con metraje adicional, "La
guerra de las galaxias" continúa en segundo lugar entre las cintas más
taquilleras de Hollywod con una recaudación de 461 millones de dólares, justo
detrás de "Titanic", la campeona de todos los tiempos.
Tras el éxito inesperado de "La guerra de las galaxias", Lucas siguió con "El
imperio contraataca" y "El regreso del Jedi" y despues con la segunda parte de
la trilogía. Desde entonces, las cinco primeras historias de la serie han
recaudado 3,400 millones en las taquillas mundiales.
De pronto, las cintas de ciencia ficción y de efectos especiales se pusieron de
moda, y en los 28 años siguientes Lucas y sus técnicos especializados han
llevado al cine a un mundo de realidad virtual que ha permitido el rodaje de
superproducciones como "Parque jurásico", "Titanic" y la trilogía de "El señor
de los anillos". Cambió la cultura Un buen número de los espectadores
que no resistieron la tentación de estar presente en el estreno mundial del
pasado jueves siguen las andanzas de la "trilogía" desde sus inicios. La gente
tiende a recordar dónde vio la primera película y ha influenciado positivamente
en un sector importante de la sociedad estadounidense
En
un rápido recorrido por Internet se puede observar que muchos fanáticos hablan
de La Guerra de las Galaxias no como una película sino como una religión. Están
los "creyentes," los "agnósticos" y los "herejes".
Aunque Star Trek también ha levantado una comunidad de "fans" esta no tiene
comparación con los miles y miles de seguidores de Star Wars, que abarcan a
gentes de procedencia y cultura muy diversa y no solo a los viejos "geeks"
que seguían las aventuras del capitán Kirk. Y es que a pesar de lo complicado
de la trama reduce al enfrentamiento entre el bien y el mal, Luke Skywalker
contra Darth Vader, un concepto que parece gustar a las audiencias.
Para el historiador del cine Peter Biskind, eso no es algo muy bueno. En una
entrevista reciente con el diario francés Le Monde, dijo que Star Wars y su
historia del bien contra el mal se convirtieron en un esquema simplista para los
éxitos de taquilla de hoy en día.
"Desafortunadamente, deberemos vivir por mucho tiempo bajo la sombra de La
Guerra de las Galaxias,” sostuvo.
Por su parte, el director Paul Schrader dijo que la serie "se comió el
corazón y el alma de Hollywood."
La industria cinematográfica cambió radicalmente con Lucas y sus aventuras
estelares. Para el critico Mark Cousins, "Ahora los directores deben pensar
más en apelar al ritmo de los adolescentes suburbanos, que en crear sus propias
visiones personales, un cambio que no ha sido muy bien recibido universalmente"
El negocio del Merchandising
Otra de las grandes aportaciones de Star Wars a Hollywood fue la revolución
del merchandising y de los productos inspirados en los héroes cinematográficos.
En sus negociaciones con la Fox, Lucas la persuadió para que le concediese los
derechos correspondientes a los productos de “La guerra de las galaxias”,
algo que en aquella época no era considerado una fuente importante de ingresos.
Tal parece que fue una buena decisión, porque Lucasfilm ha obtenido 9,000
millones de dólares con la venta de licencias para decenas de productos de todo
tipo.
Warner Brothers fue la primera en sumarse a esta revolución que proporcionaba
ingresos añadidos (a veces mayores que los procedentes de la taquilla) y compró
la editorial de historietas DC Comics, poseedora de los derechos de súperheroes
como “Batman” y “Supermán”. |