La exposición de los usuarios a las ondas emitidas por el móvil puede causar
reacciones adversas en la piel de quienes ya sufren alergias, eczemas o
dermatitis.
Después de varias pruebas de los efectos del móvil en términos neurológicos,
la novedad viene, finalmente, del área de la dermatología, a partir del estudio
del científico japonés, Hajime Kimata.
El investigador verificó que, durante una llamada telefónica móvil, el usuario
libera substancias químicas idénticas a las que libera cuando se trata de una
reacción alérgica.
Hace ya dos años que Hajime Kimata intenta alertar sobre los problemas de piel
que pueden ser causados por el uso de los móviles, pero sólo ahora reveló
pruebas concretas sobre tales efectos, las cuales fueron publicadas en la
revista Allergy (www.allergymagazine.com).
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