En el marco de la  la Conferencia Mundial de Socios de Microsoft, y ante más de 6.500 de ellos, Steve Ballmer se mostró tan eufórico como suele ser habitual en el. En su intervención ataco al sistema operativo de código libre GNU/Linux, al buscador Google y a IBM.

Ballmer no escatimó gritos y palmadas, expresando efusivamente su optimismo: "Os quiero, socios", repetía Ballmer mientras recibía su baño de multitudes.

Según Ballmer, tanto IBM como Oracle están renovando esfuerzos para acabar con la hegemonía de Windows entre las pequeñas y medianas empresas, y para ello dirigen sus ataques específicamente a sus puntos débiles, como la falta de seguridad y los continuos retrasos en el lanzamiento de aplicaciones.

Refiriéndose a Longhorn, Ballmer destacó del mismo sus funcionalidades de búsqueda, desvelando sus verdaderos objetivos: "estamos listos para convertirnos en líderes, por delante de Yahoo! y Google", dijo.

Finalmente se despachó a gusto contra Linux, descubriendo quizás las futuras intenciones de Microsoft cuando declaró que la ley de derechos de propiedad intelectual que regula las patentes necesita ponerse al día:

"La protección de las patentes es fundamental, y Linux viola 275 patentes".