Asociación de Internautas - Desde el 1 de enero de 2004, la aplicación
de un acuerdo privado entre las entidades gestoras de derechos de autor y los
principales fabricantes e importadores de soportes digitales vírgenes para datos
-integrados en Asimelec- encareció estos productos de nuevo al pasar el importe
del canon por copia privada en los Cd's de datos de 0'17 céntimos por unidad a
0'22 céntimos por unidad en 2005, lo que representa un incremento del canon
cercano al 30 por 100 (29'41%), sin tener en cuenta que, además, dicho aumento
viene gravado con el añadido del 16% correspondiente al IVA.
Los consumidores y usuarios de los soportes digitales vírgenes para uso
informático cd-r data (ciudadanos, empresas, administraciones...) han
contribuido a la recaudación por copia privada de la SGAE haciendo que dicha
recaudación se incremente en un 362% (trescientos sesenta y dos por ciento) en
el periodo que va de septiembre de 2003 a marzo de 2004. Así lo reconoce la
propia entidad de gestión al publicitar el reparto de derechos correspondiente a
marzo de 2005 en los que se contabilizan los ingresos por el canon por copia
privada en los soportes digitales de uso informático correspondientes al último
trimestre de 2003 y primer trimestre de 2004 en audio, coincidente, por tanto,
con la aplicación del acuerdo con ASIMELEC que impuso el canon por copia privada
en los Cd-r para datos.
Los "derechos recaudados" por copia privada por la principal entidad de gestión
durante el ejercicio 2003 ascendieron a 11.479.000 euros, frente a los 5.858.000
euros de 2002, prácticamente duplicados, sin que en tal volumen de “derechos
recaudados" haya tenido impacto alguno el canon por copia privada impuesto para
los soportes digitales de datos desde septiembre de 2003 (porque los soportes
digitales vírgenes para audio y video ya pagaban el canon prácticamente desde su
aparición, conviene recordar)., lo bien cierto es que durante el año 2004 se ha
producido un ligero descenso del mercado de los consumibles en datos
interanuales, según la Asociación de empresas de electrónica, tecnologías de la
información y de telecomunicaciones de España (Aetic), pese a que el consumo de
los soportes digitales vírgenes en co! ncreto viene experimentando un incremento
anual.
¿A qué es debido ese incremento en el volumen de ventas de los soportes
digitales vírgenes?
Desafortunadamente para quienes vienen sosteniendo que la culpa de todos sus
males la tienen la "piratería" e Internet, no viene auspiciado por un
crecimiento de la copia privada en soporte digital ni por la descargas, legales
e ilegales, en Internet, sino por el fenómeno de la fotografía e imagen
digitales que, desde 2003, ha adquirido un auge importantísimo; tan es así que
todos los fabricantes, importadores y distribuidores más significativos de
soportes digitales vírgenes han anudado el mantenimiento y el ligero aumento del
consumo de los mismos al fenómeno de la fotografía digital, obviamente
necesitada de soporte de almacenamiento.
Es bien significativo el informe de mayo de 2003 de Tai Editorial, en el que
todos los principales fabricantes y distribuidores de soportes digitales
refieren el incremento del consumo de tales productos en relación con el
fenómeno de la fotografía digital; tendencia que no sólo no se ha reducido ni
estancado sino que va camino de convertirse en estas fechas en otro auténtico
boom, por no mencionar el siempre emergente mercado de la telefonía inalámbrica,
imbricado ya en ese otro fenómeno de la fotografía digital.
El consumo de software aumenta en 2004
La patronal del sector informático apunta que pese a ser un sector, el
informático, en ligera recuperación tras dos años de estancamiento, es el
mercado de venta de software el que experimenta un aumento del volumen de
facturación en 2004; concretamente, refiere que en el segundo trimestre de 2004
se ha producido un aumento de las ventas de software de un 4'8 por 100 nada
menos, el principal incremento de ventas con relación a datos del año 2003 que
experimenta el sector informático, que se conozca al menos y con diferencia
respecto a los restantes productos, consumibles incluidos (entre los que se
encuentran los soportes digitales).
Como todo el mundo sabe, la venta de software también necesita generalmente de
unos soportes digitales vírgenes en los que quede fijado para su venta,
distribución y comercialización. Pese a que el artículo 25.3 de la vigente Ley
de Propiedad Intelectual excluye expresamente del canon por copia privada a los
programas de ordenador (apartado 1 del art. 25) y de los equipos y soportes
sobre los que debe fijarse ese canon (apartado 2 del art. 25), como lógica
consecuencia al pago de la licencia por el uso del programa, la realidad es que,
desde septiembre de 2003, también todos los soportes digitales vírgenes de uso
informático (datos) vienen soportando ese canon por una copia privada de la que
están expresamente excluidos por mandato del legislador.
¿Quién compensa a empresas, administraciones, profesionales y particulares?
El rechazo generalizado a la imposición indiscriminada del canon por copia
privada en todos los soportes digitales vírgenes que se perpetró en septiembre
de 2003, no está perjudicando únicamente a quienes no hacen uso de los mismos
para fijar obras sujetas a derechos de autor; existe un mercado emergente, el
del software libre, de código abierto y libre distribución, contrario a los
postulados tradicionales del copyright, que está siendo objeto de una
penalización añadida en su libre distribución al tener que quedar fijado en unos
soportes gravados con un canon del cual sus autores jamás obtendrán remuneración
alguna.
Es más, los consumidores y usuarios de obras comercializadas en soportes
digitales vírgenes están encontrándose con la imposibilidad de realizar su copia
privada (salvo que realicen una transformación de la obra adquirida pudiendo
llegar a incurrir en una conducta penalmente castigada) al venir tales obras
dotadas de sistemas anti-copia; en este sentido, incluso la Directiva europea
que ahora quiere trasponerse deprisa y corriendo desde el Gobierno, anuda la ?”
ompensación" equitativa (ya no habla de remuneración) a la no existencia de
medidas tecnológicas anti-copia porque éstas, es evidente, sí posibilitan la
remuneración directa.
Incluso la patronal Sedisi, fusionada en la superpatronal del sector informático
denominada Aetic junto con Aniel, ha sostenido en sus alegaciones al borrador
del Ministerio de Cultura sobre la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual
que los equipos y soportes destinados a usos profesionales deben quedar
excluidos del canon por copia privada.
Panorama: recaude bien y no mire el qué
Alguna de las empresas pioneras en la venta de música en Internet se está viendo
acosada por toda suerte de demandas y falacias propagadas por socios, nacionales
e internacionales, de quienes no han tenido empacho alguno en fijarles -tras la
correspondiente denuncia ante Defensa de la Competencia- unos cánones más
ajustados al mercado como acreditación del pago de los derechos de autor, cuando
su único pecado ha sido, precisamente, posibilitar la descarga de música en
Internet con todas las bendiciones legales o al menos con los parabienes de los
portaestandartes de las -demostradas como insuficientes- bendiciones parciales.
De momento, contra ellos, no se ha lanzado el anatema de “enemigos de la
cultura" ni de los”?trabajadores de la cultura", pero parece que todo llega. De
hecho, la principal entidad que agrupa a las empresas que quieren estar en el
mercado de la venta de música por Internet, la Asociacióm de Música en Internet,
se ha posicionado , como ha hecho el sindicato más representativo Comisiones
Obreras y multitud de entidades y personas, en contra de la extensión del canon
por copia privada a los soportes digitales de datos, a fin de retornar a la
situación existente antes de 1 de septiembre de 2003, en la que -conviene
recordarlo- únicamente soportaban el canon por copia privada los soportes
digitales vírgenes fabricados para audio y video, llegando dicha Asociación de
Música en Internet a asumir las alegaciones presentadas por esta Asociación de
Internautas al borrador de la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual.
La voracidad recaudatoria y la expansión de cánones por todo está llegando a
límites insospechados, como ha ocurrido recientemente en Alemania en donde
incluso los ordenadores de determinado fabricante van a tener que pagar -ate esa
mosca por el rabo- un canon de 12 euros (querían que fueran 30) a una entidad
gestora de derechos de autor de periodistas y autores al alimón, claro que allí
todavía están celebrando que las fotocopiadoras paguen canon, mientras que aquí
muchos están temiendo que, en breve, lo tenga el ?tóner" y el papel en blanco,
junto con el bolígrafo y los lápices (de colores o no). De hecho, al no haber
implantado España el canon por el préstamo al público de libros en las
bibliotecas, va a ser objeto de sanción por parte de las Autoridades
comunitarias europeas por semejante pecaminosa omisión. El asunto debe consistir
en fomentar la cultura, aunque sea a base de penalizar la lectura en las esc!
asas bibliotecas que todavía tienen la osadía de tener y de prestar libros; en
breve, esas lecturas públicas de El Quijote que tanto encadilan a nuestros
políticos van a tener que pagar la correspondiente licencia, tasa o canon,
aunque sean sin ánimo de lucro y dentro de alguna celebración centenal.
Entretanto, los consumidores, empresas, profesionales, administraciones e
instituciones de todo tipo siguen soportando el canon por copia privada aunque
les resulte incluso materialmente imposible realizarla, fundamentalmente porque
quedaría incluso feo hacerlo dentro de la jornada de trabajo, ante el silencio
del Gobierno empeñado en modificar el vigente Texto refundido de la Ley de
Propiedad Intelectual, sin solucionar este problema y sin cambiar curiosamente
el régimen legal de las entidades de gestión de derechos de autor.
Y los consumidores y usuarios nos preguntamos. ¿Refrendará el Parlamento la
Propuesta de Ley del Senado para impedir que los soportes digitales tengan
canon? . Esperamos que la Ley actue para tod@s.
Asociación de Internautas.
|