Agencias - En entrevista realizada a propósito de su visita a México para
presentar su propuesta JODI.org, que ha desarrolla junto a la creadora Joan
Heemskerk, Paesmans expresó que la rápida evolución digital de las empresas
"crean decepción, debido a que el programa es insuficiente en un periodo muy
corto".
Hace cinco años explicó, apareció la palabra netart para designar la expresión
artística naciente y junto con ella llegó "el entusiasmo de Internet, en el
que estaban artistas o diseñadores, ahora esta curiosidad ha desaparecido y para
muchos creadores es una cosa normal".
La principal preocupación para recuperar el entusiasmo, expresó, "es que en
un tiempo, las cosas decepcionan, ahora el software en dos años pierde
actualidad y ya existe otra cosa, para el interés del artista, el programa se
vuelve insuficiente, pues ahora necesitas cuadros de muchos colores con
múltiples links que puede hacer un buscador como google y el que tiene el viejo
ya no da".
Heemskerk y Paesmans se encuentran en esta ciudad para presentar a través de un
performance inaugural, que se llevará a cabo este miércoles en el Cyberlounge
del Museo Tamayo Arte Contemporáneo, su proyecto JODI.org.
En su propuesta, los netartistas producen en la pantalla de la computadora
acciones provocadoras que pretenden infringir los códigos en que se basa el
sistema simulando situaciones virulentas y contingencias de errores en la
máquina, como si se tratara de un mal funcionamiento del sistema.
Los primeros cinco años de nuestra actividad (la cual empezó exclusivamente para
la red), dijo Paesmans, "estábamos muy libres en la red e hicimos lo más
posible con este medio, para el artista la web, se volvió un medio con el que
podía estar presente siempre".
En ese contexto, los creadores se dieron a la tarea de explorar lo que ahora
llaman "la belleza del error" que funciona por medio de la
"destrucción" de iconos, fuentes (letras) o todo símbolo que se encuentra en
la pantalla y observar "como poco a poco evolución y se aumentan, es ejercer
la belleza del error y el derecho de hacerlo por que el código es algo que hemos
descubierto".
La idea para los artistas ganadores en 1999 del Webby Award otorgado por la
Academy of Digital Arts and Sciences, es transgredir el lenguaje establecido y
generar la duda y la reflexión en el usuario de "si el dato alterado es mejor
o peor que el otro" , con la intención de cuestionar lo establecido.
En esencia, señaló Paesmans, quien comenzó sus estudios de arte a los 16 años,
"sólo estamos haciendo un comentario de un juego existente (o de una sitio en la
red), no estamos cambiándolo en esencia, ni reinventándolo".
Para el netartista, la computadora es "una máquina muy compleja" en la
que funcionan muchas cosas, pero que en realidad es "la simulación de muchas
cosas, del cine, de la música, del video, es un poco la máquina postmoderna en
la que se hace mucha simulación, no hay mucho nuevo".
Es, agregó, "una manera de hacer más conveniente y fácil las cosas, pero es todo
dentro de una sola máquina, antes teníamos la máquina de escribir, el walkman,
la televisión de la que ahora se hace simulación".
Aunque ahí, la mancuerna creadora encuentra "los comandos abstractos que son
el lenguaje del ordenador" y con los que desarrollan gran parte de su
material.
En otro ejemplo de su tarea, Heemskerk y Paesmans han alterado la forma
convencional de juegos de video como el Quake (dedicado a simular una guerra) en
el que la "estructura de tres salidas: los gráficos, el sonido y el código",
son trastornados convirtiendo en blanco todos sus elementos visuales, con la
intención de proponer un nuevo enfoque.
"El sonido, explicó, es intacto, todo es blanco y todo continúa igual,
mantienen la interfase donde se van contabilizando cuantos monstruos vas matando
y cuántas vidas te van restando, pero todo incluyendo los espacios de tercera
dimensión, las armas, los monstruos, los corredores, están en blanco".
Paesmans quien también realizó escultura, performance y video finalizó
señalando: "No tenemos visiones del futuro, tenemos más del pasado, de la
historia del arte y creo que somos egoístas, pues no tenemos responsabilidad con
la máquina, yo puedo hacer con ésta lo que yo quiera".
A final de cuentas -dijo- "puedo hacer un sitio web, un juego en blanco, un
virus o un radio, somos egoístas y reinvindicamos el derecho artístico de
expresarse con todo el arte, todas las vías y todo el tiempo".
Una muestra del trabajo de los netartistas, quienes han creado sitios como 404.jodi.org,
wwwwwwwww.jodi.org, map.jodi.org, oss.jodi.org, text.jodi.org y sod.jodi.org,
entre otros, permanecerá expuesta en el Cyberlounge del Museo Tamayo hasta enero
de 2006. |