(EFE).- Los especialistas o dobles que trepan por los tejados y saltan desde
edificios en llamas, pero nunca recorren la alfombra roja, podrían cambiar esta
situación si prospera su petición para que un Oscar premie sus acrobacias.
La carrera hacia los Oscar es ardua para todos, pero más para los actores que a
menudo se juegan la vida para sorprender a los espectadores con piruetas
imposibles y cuyos nombres aparecen escondidos al final de los créditos en
filmes como "The Day After Tomorrow" o "Spiderman 2".
Cansados del anonimato de su trabajo, cuatro asociaciones de dobles de acción de
Hollywood han pedido a la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas
-la institución que organiza los premios que se celebran el domingo- que sume
una categoría más a las 24 ya existentes: la de coordinador de especialistas.
No se trata de una petición nueva porque los especialistas, en su mayoría
hombres, llevan buscando este reconocimiento desde 1990.
A pesar de que cuentan con el apoyo de cineastas como Steven Spielberg y Martin
Scorsese -cuyo filme, "El aviador", es líder en esta edición con once
candidaturas-, o incluso el actor reconvertido en gobernador de California,
Arnold Schwarzenegger, sus lamentos han caído en saco roto.
John Pavlik, un portavoz de la Academia, señaló recientemente que la institución
está dispuesta a replantearse la situación, pero advirtió de que, como dice el
refrán, "las cosas de palacio van despacio" y pueden pasar años hasta que
se instituya esta nueva categoría, si es que finalmente sucede.
Mientras tanto, los especialistas continúan con peripecias que, a menudo,
suponen fracturas y otras lesiones, como le ocurrió al veterano de la industria
Jack Gill -líder de este movimiento por el Oscar- a quien una vida saltando de
un coche a otro le costó que una placa de titanio en el cuello.
Y es que, según recuerdan las cuatro asociaciones en un comunicado conjunto, se
trata de la única sección en la industria cinematográfica que "se juega la
vida en beneficio del arte".
"El talento que se requiere de los coordinadores de dobles para que sean
creativos y seguros es enorme y se merece el reconocimiento de la Academia",
señalan las asociaciones.
Sirva como ejemplo el trabajo de Dan Bradley, quien ideó la espectacular carrera
de coches por las calles de Moscú en "Bourne Supremacy", una de las escenas más
impactantes es de la temporada.
Melissa Gilbert, presidenta del Sindicato de Actores de EEUU,
señaló que esta organización apoya la iniciativa para reconocer un trabajo
imprescindible en la mayoría de los filmes de acción, a menudo los más
taquilleros.
Se trata de súper éxitos que normalmente no obtienen candidaturas a mejor
película, pero que sí se llevan premios en categorías técnicas como efectos
especiales o mejor sonido.
En estas películas, el coordinador de especialistas se las tiene que apañar para
diseñar una escena que sorprenda a los espectadores con la ayuda de las
habitualmente escasas descripciones del guión de la película.
En verdad, la Academia sí reconoció a los dobles en una ocasión: el legendario
Yakima Canutt ganó un Oscar honorario en el año 1967 por su trabajo como
pionero que, entre otras cosas, incluye la famosa carrera de cuadrigas en "Ben
Hur".
Tiempo después, en 1993, Ken Bates obtuvo una mención especial (que no la
estatuilla) por crear un sistema especial que permitió a Bruce Willis saltar del
edificio en "Die Hard".
A lo largo de sus 77 años de vida, otras nuevas categorías han sido propuestas y
rechazadas en los Oscar, como la de mejor coreografía y mejor director de
reparto.
La inclusión más reciente es la categoría a la mejor película animada que fue
aprobada en 2002.
Gill lo ve claro: "si todo el mundo lo tiene, no sé por qué nosotros no
tenemos una categoría".
Al fin y al cabo, cuesta imaginarse "El señor de los anillos: el retorno del
rey" -el filme que barrió con once premios la temporada pasada- sin sus combates
cuerpo a cuerpo o, más difícil todavía, una película de vaqueros sin sus
correspondientes galopadas. |