La encuesta arrojó que la copia ilegal de películas significó US$ 3.800 millones, mientras que la piratería por internet alcanzó los US$ 2.300 millones. De este total, el robo de películas en los cines alcanzó los US$ 4.800 millones, situando a Estados Unidos, China y Rusia como los países que más lo practican.

Según el estudio, quienes copian y distribuyen películas en forma ilegal son preferentemente hombres, de entre 16 y 24 años de edad y con residencia en los grandes centros urbanos. El ejemplo más conocido de piratería ocurrió el año pasado, cuando una copia ilegal de "Star Wars: Episodio III Revenge of the Sith" apareció en internet antes de su estreno en cines.

Dan Glickman, presidente de la MPAA, afirmó que este informe "ayudará a realizar un plan tendiente a focalizar los esfuerzos en la lucha contra la piratería". Además, agregó que "como industria debemos continuar educando a la gente sobre las leyes de propiedad intelectual y las consecuencias de violarlas".