Inaugurado en 1999, el Voyager of the Seas ha centrado sus actividades hasta
la fecha en el Caribe. Su traslado al Mediterráneo responde a la voluntad de
Royal Caribbean de potenciar su oferta de cruceros para el público europeo,
ante las excelentes perspectivas de crecimiento del sector en este continente.
Con salida de Barcelona, Voyager of the Seas realizará diversas rutas por las
costas de España, Francia e Italia, con escalas en puertos como Palma de
Mallorca, Marsella, Génova, Livorno, Palermo, Civitavecchia-Roma, Nápoles o La
Valletta (Malta).
Increíbles actividades en alta mar: patinaje sobre hielo, escalada,
mini-golf…
Desde su misma inauguración hasta la actualidad, el Voyager of the Seas se ha
caracterizado por disponer de una de las ofertas deportivas, y de ocio y
restauración más originales e innovadoras del mundo. Por ejemplo, fue pionero en
incorporar una pared de escalada y el primero en contar con un paseo comercial
con disposición horizontal, la Royal Promenade, una nueva Rambla para Barcelona,
con una altura de cuatro cubiertas y una longitud equivalente a un campo de
fútbol.
Junto al rocódromo, situado a más de 60 metros del nivel del mar, la oferta de
actividades deportivas del Voyager of the Seas incluye una pista de patinaje
sobre hielo, pista para patinaje en línea, un campo de mini golf, una pista
polideportiva para la práctica de voleibol y baloncesto, un circuito de footing
y como oferta, casi única, una piscina especial donde practicar deportes
acuáticos como el sufr. . Además, cuenta con tres piscinas, uno de los mayores
centros de fitness en alta mar y un completo spa y salón de belleza (peluquería,
manicura, pedicura, tratamientos faciales, sauna y programas de masaje).
Ocio para todas las edades: teatro, casino, discotecas, bares, restaurantes…
Buena parte de las propuestas de ocio y restauración del Voyager of the Seas se
concentran alrededor de la Royal Promenade, que cuenta con un pub, una
coctelería, un bar deportivo, una heladería, una perfumería, una joyería y
establecimientos de moda y obsequios. Además, el crucero de Royal Caribbean
dispone de un casino, un gran teatro, diversas discotecas y un programa especial
de actividades especiales para niños y jóvenes (3 a 17 años).
La oferta de alojamiento del Voyager of the Seas está formada por 1.557
camarotes, 939 de los cuales son exteriores. Todos los camarotes cuentan con
cuarto de baño, TV, conexión a Internet y aire acondicionado. Entre ellos,
destaca la lujosa Suite Royal o los camarotes interiores con vistas a la Royal
Promenade.
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