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A partir de este fallo, Sony deberá indemnizar económicamente a los perjudicados o bien otorgarles descargas gratuitas, a fin de solucionar el inconveniente. Esta solución ya había sido propuesta por la multinacional en enero, por lo que se mostró conforme con la medida.

El problema reside en que el sistema anticopia está basado en la técnica conocida como Rootkit, utilizada por los hackers para que una aplicación quede oculta y así esconder virus, spyware u otro tipo de software malicioso. De este modo, la protección anticopia se instalaba automáticamente, sin que se enterara el usuario.

Cindy Cohn, directora de la fundación Frontera Electrónica, afirmó que "este fallo hace que los consumidores estén en primer lugar: la música debe poder escucharse en cualquier artefacto electrónico sin instalar ningún software oculto.