Agencias - El documento prevé prohibir la mayoría de las apuestas en
Internet, una industria que mueve 12.000 millones de dólares al año (unos 9.400
millones de euros).
El proyecto de ley, apadrinado por los congresistas republicanos Bob Goodlatte
del Estado de Virginia y Jim Leach del Estado de Iowa, es parte
del hincapié de su partido en los valores morales mientras se aproximan las
elecciones al Congreso este otoño.
Este proyecto cuenta con el apoyo de grupos activistas religiosos y
conservadores, quienes desean mantener las apuestas fuera del alcance de
menores.
Aún así, si el Congreso, controlado por los republicanos, aprueba la
legislación, se desconoce si el Senado dará el visto bueno a una norma similar
mientras el Congreso intenta terminar su trabajo antes de las elecciones
generales de noviembre.
Los oponentes a la iniciativa dicen que la legislación busca imponer moralidad.
El congresista demócrata del Estado de Massachusetts, Barney Frank, dijo el
lunes que el proyecto es vergonzoso.
"Si la gente desea hacer algo, y eso no hace daño a nadie, nosotros debemos
preocuparnos de nuestros negocios", afirmó el congresista. " Esto es un
proyecto que le dice a los adultos que no tienen que hacer algo porque hay gente
en esta cámara que desaprueba lo que hacen".
El proyecto de ley podría convertir en ilegal que los bancos y compañías de
tarjetas de crédito paguen en páginas de apuestas online.
Los legisladores estiman en 2.300 los sitios de apuestas en Internet.
Además, el Congreso debatirá una enmienda, la cual eliminaría las excepciones
incluidas en el proyecto. El congresista demócrata del Estado de Michigan, John
Conyers, dijo que el proyecto exceptúa las carreras de caballos y las loterías
de propiedad estatal y las gestionadas por el Estado. "Hay que deshacerse de
todo esto si nosotros lo vamos a hacer", afirmó el congresista.
Inversores de compañías de apuestas con sede en Reino Unido como Partygaming y
888 Holdings han supervisado la legislación americana. |