Agencias - La idea 'luminosa' de los investigadores japoneses es explotar la
luz generada por un diodo (LED), similar al que tienen las linternas de bolsillo
o los semáforos del tráfico, para transmitir datos.
Se trata de hacer parpadear rápidamente esos LED en función del contenido de lo
que debe transmitirse para enviar una señal (texto, imagen, sonido, vídeo) que
un terminal de recepción, por ejemplo un teléfono móvil, podrá descifrar
mediante un programa informático.
En relación con otras tecnologías de transmisión de información, el uso de la
luz visible ofrece muchas ventajas, según los científicos.
De esta forma, permite aumentar la potencia a varias decenas de watts, y
aumentar el alcance sin provocar daños en los ojos, lo que es imposible con el
infrarrojo.
Por otra parte y contrariamente a las tecnologías de transmisión inalámbricas a
través de microondas como WIFI, la luz visible no supone riesgos para la salud.
Si bien la idea de explotar la luz como vehículo de señales no es nueva, el
proyecto de utilizar la luz visible es bastante reciente.
"Desde hace bastante tiempo la luz es ya empleada cotidianamente por millones de
personas para transmitir datos. Por ejemplo cuando un telespectador utiliza su
mando a distancia infrarrojo para cambiar de canal", explicó el profesor
Nakagawz, presidente de un consorcio de industriales japoneses para la
comunicación por luz visible (VLCC).
El vicepresidente del VLCC y profesor de la Universidad de Tokio, Ken Sakamura,
ve en esta tecnología un medio simple y seguro de nuevos servicios para
"facilitar la vida".
Los científicos imaginan el uso de semáforos que utilicen LED (más económicos y
con una duración mayor que las lámparas) para difundir informaciones sobre la
circulación o para alertar sobre una velocidad excesiva, por ejemplo.
El alcance de un rayo de luz LED, incluso el de una pequeña linterna, puede
llegar a varios cientos de metros y en términos de transmisión de datos una
cadencia sumamente elevada podría lograrse con esta nueva tecnología.
|