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Los españoles tienen sus propios hábitos a la hora de hacer la maleta para irse de viaje. Casi todos llevan un buen libro para disfrutar de sus días libres, la mayoría no se separa de sus teléfonos móviles, y casi ninguno perdona la “sagrada” siesta durante las vacaciones, según revela un estudio de Hotels.com, la web de reservas de hoteles más visitada del mundo.

El libro es el único objeto que casi nunca falta en el equipaje de los españoles, convirtiéndose en el entretenimiento preferido durante el anhelado tiempo libre. El aseo personal muestra la disparidad de criterios entre hombres y mujeres a la hora de plantearse las vacaciones. Mientras el 42,1% de ellas lleva su maquinilla de depilación, el 69,4% de ellos “olvida” sus utensilios de afeitar en casa. Además, a los españoles les gusta estar preparados para cualquier eventualidad cuando se van de vacaciones. Uno de cada tres, el 39,5%, se acuerda de llevar preservativos en su equipaje.

En España hay más móviles que habitantes (188.000 más), y para la mayoría es impensable quedar incomunicada durante sus días de vacaciones. El 68,4% de los viajeros se lleva el teléfono móvil dondequiera que vaya.

A pesar de la adoración que los españoles sienten por su propia dieta mediterránea, están abiertos a probar los platos autóctonos de su destino de vacaciones, ya que sólo el 6,7% de los viajeros encuestados por Hotels.com se lleva comida. El elemento que debe quedar en casa por excelencia, lejos del tiempo libre, es el despertador. El 94,7% de los españoles decide dejarlo en casa y no dejar que les limite sus siestas vacacionales.

Respecto a lo que se les olvida en casa, son sobre todo los productos de aseo como el cepillo de dientes, los cosméticos como la crema protectora del sol y un paraguas para prevenir el mal tiempo. El 61,1%, 44,4% y 38,9% de los españoles, respectivamente, tienen que comprar estos artículos en sus lugares de destino. Hotels.com ha detectado, además, que a los turistas españoles les gusta aceptar lo que consideran souvenirs de los hoteles en los que se alojan: el 84,2% añade los productos de baño como el champú o jabón a sus maletas, el 42,1% se lleva las zapatillas y el 49,7% las cerillas.