Agencias - "Los niños pasan muchas horas a la semana en comunidades
virtuales, construyendo sus propios perfiles y hablando con amigos. Sin embargo,
lo que podría parecer una diversión inocente tiene un lado oscuro, siniestro",
dijo Jessica Ross, redactora jefe de la revista Computing Which?.
Las redes sociales de Internet han revolucionado la red en los últimos años,
permitiendo a sus usuarios crear sus propias páginas web, jugar en línea,
intercambiar fotos y vídeos, y escuchar las últimas novedades musicales.
MySpace se jacta de tener una comunidad de cerca de 80 millones de usuarios,
mientas que Bebo asegura que sólo en abril recibió la visita de dos millones de
usuarios británicos e irlandeses, la mitad de edades comprendidas entre 13 y 18
años.
El reportaje de Which? señala que la libertad que se ofrece a los usuarios de
estas páginas significa se éstos arriesgan a recibir abusos por personas que
mienten sobre su edad y también proporcionan un "ambiente maduro para el
ciberacoso o ciberbullying".
La información cita la página de un adolescente que pidió a sus amigos que
votasen sobre si una chica que conocían tenía SIDA y que en cuestión de minutos
había descubierto también enlaces a páginas con contenidos pornográficos.
"Los padres pueden sorprenderse al descubrir que actividades ilegales para
los jóvenes, como beber o el sexo, están disponibles para que todos puedan
leerlo", afirma el reportaje.
Los investigadores de la revista aseguraron que habían abierto una cuenta en
MySpace, fingiendo tener 14 años, sin tener que ofrecer ninguna prueba de su
identidad o edad.
"Los usuarios adolescentes necesitan ser conscientes de que no se puede
descubrir quién se oculta detrás de la apariencia de un 'amigo'", dijo Ross.
El reportaje añade el caso de la madre de una niña estadounidense de 14 años que
demandó a MySpace por 30 millones de dólares (más de 23,5 millones de euros)
después de asegurar que su hija había sido violada por un chico de 19 años al
que había conocido en el site.
Ambas páginas web han aclarado sus normas y consejos, advirtiendo a la gente que
tenga cuidado al añadir contactos a su lista y que informen de acoso o
contenidos inapropiados.
El presidente ejecutivo de Bebo, Michael Birch, dijo a Computing Which? que sólo
una pequeña minoría de los usuarios de su página se habían topado con acosos, y
la revista apuntó que ninguno de los adolescentes con los que había hablado
sufrió algún tipo de abuso.
Birch afirmó que los niños se comportan exactamente igual que en el mundo real.
"De pronto, los padres se dan cuenta de lo que pasa y la reacción automática
es culpar a Bebo", aseguró la revista.
"Ver lo que hacen los niños podría ayudar a los padres a saber más sobre la
realidad de la infancia", concluyó.
|