Un tercio de los europeos fuman. Saber que este hábito puede o no llevarnos a sellar una relación en la que exista una gran afinidad con la otra persona nos da qué pensar. De nuevo, las estadísticas reflejan que existen grandes diferencias entre las mujeres europeas y su posición ante una costumbre que la sociedad esta dando la importancia que se merece.

Los últimos resultados del test de personalidad de be2 (Julio 2006), la Web de búsqueda de pareja estable (www.be2.es), que contestaron más de millón y medio de usuarios muestran que entre las solas europeas las españolas (47%) prefieren, con gran diferencia respecto a alemanas (34%), francesas (35%) e italianas (36%), que sus parejas no fumen.

El 9% de las alemanas desean que su pareja fume en comparación con las francesas (6%), las italianas (6%) y finalmente las españolas (2%).

Aunque deseamos un “amor sin malos humos”, las solas que opinan que no tiene importancia el hecho de que su pareja fume o no son el 60% de las francesas, el 58% de las alemanas e italianas y el 51% de las españolas.

“Estos pequeños-grandes detalles de aceptación o no, de los hábitos del otro/a, adquieren su importancia a la hora de establecer una relación de pareja; ya que pueden ser objeto de desencuentros y en ocasiones, entre otros motivos, pueden hacer que la mejor de las relaciones esté condicionada por el esfuerzo de cada uno de los componentes de la pareja, a tener que modificar su mentalidad o costumbres, aunque cuando esto se produce también es importante tener en cuenta el apoyo aportado para conseguirlo" comenta la Directora de la revista de psicología Todos SOMOS, Mª del Carmen Álvarez.