Abocada a facilitar la grabación y la disponibilidad de contenidos audiovisuales sin necesidad de la mediación de una PC, SanDisk lanzó el V-Mate, un dispositivo similar a un lector de tarjetas de memoria que además opera como reproductor.
El rasgo que distingue a la herramienta de SanDisk es su independencia, dado que la unidad permite obtener información de audio y video de cualquier fuente.
Los contenidos audiovisuales son captados a través de una conexión analógica y posteriormente son digitalizados para permitir su grabación en una tarjeta de memoria.
Así, tanto las películas de DVD como la programación televisiva, pueden ser visualizadas mediante el uso de un celular, un centro multimedia, u otro tipo de reproductor portátil.
Para utilizar el V-Mate es necesario que la fuente de imagen tenga tres salidas RCA: una de video compuesto y dos de audio analógico estéreo. Los mismos conectores, pero de entrada, también deben estar presentes en la pantalla.
Las conexiones se completan con un emisor de infrarrojos, un puerto mini-USB, que convierte al equipo en un lector de tarjetas convencional, y la alimentación eléctrica.
Además, el módulo de SanDisk incorpora todos los cables necesarios, un adaptador de corriente externo de 5 voltios y un pequeño mando a distancia.
Por otra parte, los formatos SD Card y SDHC (Mini y Micro), MemoryStick (Pro, Duo y Pro Duo); MMC (Plus y Mobile), y RS-MMC (DV) se encargan de dar soporte a los archivos, que pueden ser codificados en MPEG-4 o en H.263.
Al igual que un reproductor de video tradicional, el V-Mate puede programarse para grabar una señal televisiva de modo automático.
De este modo, se pueden preparar hasta 30 capturas con la opción de repeticiones periódicas, siempre y cuando la fecha y la hora estén coordinadas en ambos dispositivos.
El precio de la novedad de SanDisk ronda los € 120.