La Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados de Defensa (DARPA, en inglés) quiere que los soldados estadounidenses estén bien equipados en el campo de batalla. Y si es posible, al mejor precio. Por ello, ha lanzado a concurso un proyecto para empresas para que desarrollen “una cámara térmica” ‘low-cost’.
DARPA especifica en su proyecto dónde podría ir colocada esta cámara térmica para que los soldados obtengan el mejor rendimiento de ella. Por un lado, podría ser colocada en la mirilla del arma o en el salpicadero de los coches utlizados por los soldados. Otra de las opciones sería colocar el dispositivo en “una pequeña plataforma de mano”, como por ejemplo un teléfono móvil, que iría acoplado en el arma del soldado.
Por otro lado, DARPA ha planteado en el proyecto otro objetivo mucho más ambicioso. Quiere que la resolución de la cámara térmica permita diferenciar a “un adulto en posición vertical, horizontal o que permanezca inmóbil” y que si esa persona se dirige hacia el soldado “identificar si va armado con un dispositivo u objeto potencialmente peligroso para el soldado”, e incluso distinguir a los enemigos de los compañeros del soldado equipado con el dispositivo en cuestión.
El proyecto ‘DARPA Low-Cost Thermal Imager Manufacturing’ (LCTI-M) es compatible con los demás sistemas de sensores militares ya desarrollados, así que no sería muy difícil diseñar un plug-in para adaptarlo a ellos.
La empresa que finalmente sea la encargada de desarrollar el proyecto de DARPA deberá hacerlo en un plazo de tres años y crear una cámara que tenga un valor en el mercado inferior a los 367 euros (500 dólares).