La Comisión Europea ha adoptado este lunes las normas técnicas para facilitar el uso de la banda ancha móvil de alta velocidad 4G en dispositivos móviles como teléfonos, portátiles o tabletas. Las normas tienen como objetivo evitar problemas de interferencia con los actuales aparatos GSM y 3G.
Los Estados miembros tienen ahora de plazo hasta el 31 de diciembre de 2011 para incorporar estas normas a sus respectivas legislaciones nacionales.
“Esta decisión permitirá que los dispositivos móviles 4G más recientes puedan acceder al espectro radioeléctrico que necesitan y, por lo tanto, servirá de estímulo para los servicios de banda ancha de alta velocidad y fomentará una mayor competencia”, ha dicho la vicepresidenta de la Comisión y responsable de Telecomunicaciones, Neelie Kroes, en un comunicado.
La decisión de la Comisión establece los parámetros técnicos que permiten la coexistencia, en las bandas de frecuencias de 900 MHz y 1800 MHz, del GSM (teléfonos móviles 2G), de los sistemas 3G que añaden la Internet móvil a los servicios telefónicos normales y de la tecnología móvil 4G, que hace posible una banda ancha de gran velocidad.
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