|
'Cada pequeña tragedia es siempre un buen punto de partida para una comedia',
explicaba hoy, en la presentación de su película, Fernando Guillén Cuervo, que
se ha inspirado en 'un tema mítico de los años 80', 'Los managers'
-una canción de Kiko Veneno y Raimundo y Rafael Amador- para contar una
disparatada historia sobre 'la supervivencia en el mundo de la música'.
Fran Perea y Paco León protagonizan esta película que se estrena hoy en España a
lo grande, con doscientas copias.
Ellos dan vida a David y Pipo, dos hermanos veinteañeros que trabajan con su
padre en un desguace de automóviles y que nunca han pensado en explotar su
talento musical.
Quienes si lo hacen, nada más escucharles por casualidad, son Rena (Manuel
Tallafé) y Maca (Enrique Villén), dos cuarentones sin oficio ni beneficio y que,
para solucionar sus problemas económicos, deciden convertirse en managers de los
primeros, a quienes convencen para firmar un contrato, para emprender una gira
veraniega actuando en fiestas de pueblos andaluces y para perseguir el sueño del
éxito, en su caso con el objetivo de salir en un concurso de televisión de
Lauren Postigo.
'Los reyes del king' será el nombre con el que este dúo y sus managers se lancen
a la carretera en una gira que, sin que ellos sepan, les ha organizado Rota, una
folclórica retirada y convertida en una auténtica mafiosa, a la que da vida
María Jiménez, y en la que estos chicos se darán cuenta de que triunfar no es
nada fácil y que el sueño del éxito puede convertirse en una pesadilla.
Para empezar, y después de tener que sustituir sus propias canciones por temas
como el 'Aserejé' en sus conciertos, los hermanos se toparán en su gira con
Josete, un cantante de bodas y fiestas populares que no está dispuesto a que
nadie le quite el sitio y que interpreta Sancho Gracia, quien en la película se
convierte en un clon de Tom Jones cantando, entre otras, 'Sex bomb'.
La canción de 'Los managers' no ha sido la única inspiración de Fernando Guillén
Cuervo para crear esta película que 'no es otra cosa que una comedia sin muchas
pretensiones', según decía hoy el director rodeado de la mayor parte del
reparto, incluido el propio Lauren Postigo, que, según contó, salió dos días del
hospital en el que estaba internado para acudir el rodaje a hacer de sí mismo,
el presentador de un concurso de televisión para aspirantes a artistas.
Así, Guillén Cuervo también ha querido en esta película reflejar una de 'las dos
caras de la moneda' de 'fenómenos como los de Operación Triunfo' que menos se
ven, 'la de los que se quedan en la cola' y no llegan a conocer el éxito, aunque
en 'Los mánagers' el dúo de 'Los reyes del King' logran finalmente su objetivo.
Para Guillén Cuervo la dirección de su primer largometraje en solitario ha sido
'una experiencia maravillosa', en la que 'he disfrutado como en mi vida' y en la
que se ha sentido 'como un vampiro, chupándole la sangre a todos mis
compañeros'. |
