Agencias - De este modo, Kasparov no
pudo desquitarse de la derrota que sufrió en 1997 ante el superordenador de IBM
Deep Blue y fue la segunda ocasión en pocos meses que un avanzado programa no
puede ser superado por uno de los mejores ajedrecistas del planeta.
En octubre pasado, el campeón del mundo, Vladimir Kramnik, de Rusia, jugó ocho
partidas con el programa Deep Fritz desarrollado en Alemania y la serie terminó
con empate de 4-4.
Kasparov, considerado por muchos como el mejor jugador de la historia de
ajedrez, y el programa Deep Junior, ganador del campeonato mundial entre
ordenadores, ganaron una partida cada uno y el resto quedó en tablas.
A cada victoria corresponde un punto y las tablas valen medio.
Kasparov dijo que la psicología jugó un papel crucial en su estrategia para el
encuentro del viernes, el cual "no quería perder", y ofreció tablas en la
jugada 28 en lugar de correr el riesgo de cometer un error costoso en una lucha
prolongada.
Los programas como Deep Junior juegan al nivel de un gran maestro y son
implacables con los errores con su cálculo preciso, sin ponerse nerviosos ni
sentir la presión de un momento en que se teme que los procesadores están
comenzando a superar a los jugadores humanos más experimentados.
La formación de un gran maestro de ajedrez, a partir del momento en que una
persona aprende el movimiento de las piezas, generalmente de niño, es como
promedio de 12 a 15 años.
"El resultado de la partida de hoy decidía la serie (...) para un jugador
humano es una gran responsabilidad, porque incluso si tuviera probabilidades de
ganar, un error lo echaría todo a perder", dijo Kasparov.
"Cuando uno juega con otro humano, siempre existe la esperanza de que le
devuelvan el favor", agregó el ajedrecista de 39 años y primero en el
escalafón mundial por encima del campeón del mundo.
El premio de 500.000 dólares fue repartido entre Kasparov y los programadores
israelíes de Deep Junior. Kasparov además recibió una prima de 500.000 dólares
por jugar.
El programador Shay Bushinsky elogió a Kasparov por haber jugado en su
estilo agresivo natural en lugar de la cautela que mostró en las partidas con
Deep Blue hace seis años.
La serie se jugó en el Athletic Club de Nueva York y fue transmitido en directo
por Internet.
"Por supuesto que estoy muy contento con el resultado porque no sabía qué
esperar", dijo Bushinsky, que desarrolló el software, que puede
operar en un ordenador regular, con su compañero Amir Ban, un científico
israelí
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