El Grupo de Delitos Tecnológicos e Informáticos de la Jefatura de Barcelona recibió una denuncia de una joven Barcelonesa que sin comérselo ni bebérselo se encontraba inscrita en multitud de foros y sites de contactos ofreciéndose para mantener contactos sexuales.

En todos ellos constaban sus nombres y apellidos, dirección y teléfono. Esta situación provoco que recibiese multitud de llamadas de personas interesadas en establecer esos contactos de los que ella no sabía nada-

La policía inició la investigación y descubrió que tras los "posts" se encontraba una conocida de la denunciante, una joven de 22 que por celos había iniciado esas acciones a fin de recuperar el novio que la chica le "había robado".

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