El encuentro que se inició ayer cuenta con más de doscientas
sesiones técnicas dedicadas al entorno Microsoft y sus aplicaciones en la
empresa, así como al comercio electrónico y el desarrollo de tecnologías de la
comunicación.
Este es el tercer año consecutivo que Microsoft elige la capital catalana para
celebrar su mayor congreso europeo, tras haberlo llevado a cabo en otras
ediciones en la ciudad francesa de Niza y la capital holandesa, Amsterdam.