"Es una gran oportunidad para el talento", opinan algunos expertos tras
darse a conocer el interés de grandes anunciantes para hacerse con los servicios
de pequeñas pero eficientes agencias de publicidad. Sun, Coca Cola, son algunas
de las compañías que ya han iniciado contactos en este terreno para que algunas
de sus marcas o productos sean representadas por ellas.
Hace pocos días, el director de publicidad y marketing del mayor anunciante de
los EEUUU, C. J. Fraleigh de General Motors, acuso en un foro del
Advertising Age que "las grandes agencias están más preocupadas en la
reducción de costes que en establecer conexiones con los consumidores".
Los conglomerados de agencias "se han vuelto flojos y fofos" dijo
Fraleigh, que hizo sus comentarios en una entrevista realizada por la revista
Advertising Age. "Hay mucha gente buscando una alternativa atractiva". No
quiso referirse a una agencia especifica, pero GM emplea a Interpublic Group,
Publicis Groupe y Omnicom Group.
También Sun se ha unido a estas críticas a la vez que ha iniciado la
búsqueda de nuevas agencias que complementen el trabajo que desde hace años
viene realizando JWT. "Las agencias globales solamente quieren hablar del
próximo spot de 30 segundos", dice Scott Kraft, vicepresidente de
publicidad de la firma informática. La empresa que esta buscando reducir costes
sin perder su presencia publicitaria cree que las agencias independientes pueden
ayudar a generar mayor repercusión de la marca con su trabajo a un precio más
reducidoAunque sin duda la decisión más relevante ha sido la tomada por
Coca-Cola, que optará por agencias independientes para la publicidad de su
refresco Sprite. Aunque Sprite es el líder de mercado estadounidense de los
refrescos de lima-limón, Sierra Mist, de PepsiCo, está ganando terreno. En un
esfuerzo por encontrar nuevas ideas para Sprite, Coca-Cola ha solicitado
propuestas de “Modernista” en Boston; “Wong Doody” de Seattle; DiNoto en Nueva
York; y “Wieden + Kennedy” en Portland.
A principios de año, Coca-Cola ya pasó por encima de su agencia líder, McCann-Erickson,
y nombró a “Berlin Cameron/Red Cell”, otra agencia boutique, como su agencia
creativa en EEUU para la Coca-Cola Clásica. La marca sigue siendo cliente de
McCann.
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