Angel Cortés -Los operadores españoles alternativos a Telefónica no
están dispuestos a plantar cara a Telefónica ofreciendo un servicio competitivo
y de calidad. Mientras en Europa, el impacto de la competencia ha llevado a
reducir el precio del acceso a Internet de banda ancha y a lanzar nuevos
servicios con mayor rapidez, para seguir cobrando los 39 €, en España, se
pretende hacer todo lo contrario, reducir la velocidad de acceso para mantener
los precios actuales de 256, 512 y 2MB.
Según se daba a conocer ayer, los proveedores españoles agrupados en ASTEL han
solicitado autorización a la CMT para que Telefónica comercialice en el tramo
mayorista accesos ADSL a 128kb (semejantes a los que ofrecen los cableoperadores)
como solución economica para el acceso a la banda ancha.
Presumiblemente en caso de que la CMT autorizase esta petición, el precio de
este acceso podría situarse entorno a los 24 euros, la cifra "magica" que han
venido reclamando las asociaciones de usuarios y sectoriales como el más
adecuado para favorecer la implantación de esta modalidad de acceso en los
hogares españoles.
Ayer mismo la Asociaciación de Internautas denunciaba que "esta
petición de Astel no deja de ser mas que una nueva medida para "camuflar" la
autentica situación en la que se encuentra el acceso a internet en España y que
no soluciona el problema de fondo que tenemos los usuarios de Adsl españoles: el
Adsl más caro y lento de Europa".
Asimismo recordaba que tal como refleja el informe anual de la CMT, "la
inversión en telecomunicaciones tuvo una caída histórica del 32% durante el
pasado año" y que " esta petición de Astel no significa una mejora en las
inversiones (ni siquiera una mejora del ancho de banda), ni en la calidad del
servicio y su verdadera intención es solo incidir en la actitud de revendedores
de servicios de las operadoras en competencia, en detrimento de las inversiones
y de la eficiencia de las infraestructuras de telecomunicaciones"