El director de Relaciones Instituciones y Asuntos Legales de la Asociación
de Comercio Electrónico, Iñaki Uriarte, afirmó el viernes en
el Escorial que el Gobierno está preparando un proyecto de decreto ley para
regular un distintivo público que garantice el comercio electrónico. |
Uriarte,
que participó en el curso de verano organizado por la Complutense "La empresa
ante las tecnologías de la información y los negocios electrónicos" calificó el
proyecto como "novedad".
Explicó que de lo que se trata es de establecer unos
requisitos "mínimos" que han de cumplir los códigos de conducta en el comercio
electrónico, es decir, una serie de recomendaciones que garanticen un comercio
electrónico de calidad y de acuerdo a la ley. Añadió que la futura norma será
aplicada tanto para las consumidores como las empresas que hagan uso de este
distintivo público.
Para obtener tal distintivo, se debe analizar si un
determinado código de conducta de una empresa de comercio electrónico recoge las
garantías de la legislación vigente y se ocupa de aspectos tales como la
protección de menores o de las personas discapacitadas. La participación de los
consumidores y usuarios en la decisión de la obtención del distintivo público,
es "bastante fuerte", indicó Uriarte, porque ellos deciden si un código de
conducta es aprobado o no, paso previo a la elaboración del dictamen, favorable
o desfavorable, que otorgue la distinción a las empresas. Además, las empresas
tendrán que adherirse al Sistema Arbitral de Consumo para la resolución de
controversias con los consumidores y se establecerán procedimientos de
evaluación con diferentes grados de sanciones para aquellos que incumplan con la
legislación.
El proyecto de Real Decreto también recoge una serie de
obligaciones para las entidades promotoras, como informar al Instituto Nacional
de Consumo de las bajas y al público de aspectos de los códigos de conducta,
como por ejemplo, los procedimientos por los que se puede denunciar a una
empresa dedicada al comercio electrónico.
Además, las promotoras deben remitir
anualmente la eficacia de los códigos de conducta a los usuarios y actualizar
permanentemente los contenidos de sus portales. La concesión y retirada del
distintivo corresponde al Instituto Nacional de Consumo, y el dictamen favorable
o desfavorable para otorgarlo al Ministerio de Ciencia y Tecnología y la Agencia
de Protección de Datos, hasta que finalmente se adopte el distintivo por
resolución del director del Instituto Nacional de Consumo y se publique en el BOE.
Uriarte habló también de un sello de garantía denominado "Confianza on-line",
un sistema de autorregulación del comercio electrónico, que cuenta con
participación pública y privada y con un mecanismo de resoluciones de
conflictos, por ejemplo, aquellos originados por las quejas de un consumidor por
la gran cantidad de publicidad que recibe. El director concluyó refiriéndose al
"Euro-label", un organismo con el que los empresarios de comercio
electrónico se intentan adherir para elaborar un código de conducta a nivel
comunitario |