La estafa consiste en un aviso que aparece en el ordenador mientras se está navegando y que aconseja bajar un programa que acaba desconfigurando el ordenador y generando una llamada internacional a un servidor de Guinea Bissau y las Islas Cook a un precio muy elevado.

Según el director de leste servicio, Xavier Palacios, se ha detectado que 500 usuarios andorranos han padecido los efectos durante el mes de deciembre y han llegado a pagar, en algunos casos, facturas superiores a los 1.000 euros.