|
Noticias
relacionadas |
|
|
|
Así se reparte el dinero de un disco de 18 euros según AFYVE (la asociación
de discográficas españolas).
IVA:
16%: 2´49 euros.
Tienda: 40´2 %: 7´25 euros.
Discográfica un 24´4% 4´41 euros.
El distribuidor un 4% 0´73 euros.
La fabricación un 4% 0´73 euros.
Derechos de autor un 4% 0´73 euros.
Royalty para el artista 9´4% 1´69 euros.
A juzgar por estas cifras de las discográficas, los músicos –si son a la vez
autores e interpretes– reciben aproximadamente el 15% del precio de portada de
cada CD. Sin embargo, pocos son los que pueden aspirar a estos porcentajes.
La mayoría de las discográficas multinacionales suelen firmar a sus nuevos
artistas por un período de cinco discos. El royalty de estos primeros contratos
suele ser de sólo el 8% –no del 9,4%– y muchos sellos incluyen cláusulas que
rebajan esta cifra hasta el 3% en caso de que los discos se vendan durante una
campaña de promoción televisiva o a precio de oferta. Sólo los artistas que
negocian contrato desde una posición de fuerza –después de entregar sus primeros
cinco LPs– pueden conseguir un royalty más elevado. Este porcentaje, además, se
calcula sobre un precio inferior al de venta en las tiendas.
El 4% del dinero del CD que se destina a los derechos de autor tampoco llega
íntegro al bolsillo del compositor. La SGAE cobra de media un porcentaje del 15%
del total recaudado en concepto de gestión. Además, la mayoría de las
discográficas obligan a sus músicos a firmar con su empresa editora que se queda
con la mitad –a veces más– de los derechos de autor. Algunas radiofórmulas
utilizan el mismo método para cobrar a través de una editora musical por la
promoción. Al final, el 4% se reduce a menos de la mitad. Con estos matices, el
porcentaje real que reciben los músicos en España de cada disco vendido rara vez
supera el 8%. El 7% restante hasta alcanzar el 15% se reparte entre
discográficas, editoras y la SGAE
|