’’El objetivo -recaudar 100 millones de dólares- se
alcanzó dos meses antes de lo previsto’’, se congratuló el equipo de Kerry
en su sitio de internet, destacando que se alcanzaron estos resultados a pesar
de la propaganda negativa realizada por el presidente republicano saliente
George W. Bush, que le costó alrededor de 80 millones de dólares.
Desde el super-martes 2 de marzo, día en el que Kerry se convirtió en el
favorito para la investidura demócrata, 800.000 estadounidenses contribuyeron
financieramente a la causa de Kerry, agrega en el comunicado Mary Beth Cahill,
una de las responsables de la campaña.
Sólo en el mes de mayo, los fondos recaudados por Kerry ascendieron a 26
millones de dólares, es decir más que los 13 millones reunidos durante 2000 para
la primera campaña presidencial de George W. Bush, señala el sitio.
Cerca de las tres cuartas partes de las contribuciones provienen de militantes
de base que realizan donaciones en los mítines electorales. Desde que comenzó la
campaña electoral, John Kerrry recogió 145 millones de dólares.
Bush, cuyas últimas cifras no fueron publicadas, habría conseguido cerca de 200
millones de dólares. Los últimos sondeos le dan ventaja a John Kerry sobre Bush
en intenciones de voto.
|