Tras intervenir en uno de los cursos de verano de la
Universidad Complutense, Bustelo declaró a Europa Press que tanto al
Gobierno como al organismo que preside les "encantaría" que Ono y Auna
fusionaran sus actividades y recordó que ambas operadoras han realizado diversas
adquisiciones en los últimos meses y "se han convertido en algo más grandes".
En su opinión, la integración de las dos compañías de cable no
sería "muy difícil", dado que cada una está presente en regiones
diferentes. "Cuanto más grandes y más fuertes son las operadoras
alternativas, mejor es para hacer frente al incumbente. Todo lo que sea crear
empresas fuertes es bueno", insistió.
De este modo, Bustelo respaldó las opiniones expresadas desde el nuevo Gobierno,
tanto por parte del ministro de Industria, José Montilla, como del secretario de
Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros, sobre la necesidad de que se
produzca un proceso de concentración en el sector de las telecomunicaciones y,
más concretamente, en el mercado de la telefonía fija.
No obstante, rechazó la idea de que en el mercado español no haya sitio para las
operadoras existentes, y apuntó que hay compañías pequeñas "que están
ganándose bastante bien la vida" y operadoras regionales "que están
funcionando bien". En cualquier caso, remarcó que ni a la CMT ni el Gobierno
les corresponde decidir lo que deben hacer las empresas.
Asimismo, Bustelo aseguró que las asociaciones de consumidores y usuarios
"exageran un poco" en cuanto a los fraudes que puede provocar la nueva
normativa sobre preasignación aprobada recientemente. A su juicio, es muy
difícil "a partir de un fraude tomar normas de aplicación general", a lo que
se añade que "no se puede pensar que el usuario es un inútil que no toma ninguna
medida".
En cuanto a Xfera, la cuarta operadora de telefonía móvil de tercera generación
(UMTS), Bustelo señaló que ha comunicado al regulador que arrancará sus
actividades en "uno de los primeros meses de 2005", aunque matizó que el
hecho de que hasta ahora no hubiera desvelado la fecha de inicio de sus
operaciones "no es un problema formal ni normativo", sino un contratiempo que
afecta a la propia compañía dado que el mercado de la telefonía móvil "está muy
competido".
El presidente de la CMT confió en que en primavera del año que viene esté
finalizado el proceso de análisis y definición de los mercados relevantes que
debe realizar para adaptar el nuevo marco legislativo comunitario. Para
entonces, el regulador podrá determinar en qué mercados puede levantar
obligaciones, en cuáles debe mantenerlas y en cuáles ha de introducir nuevas
obligaciones. |