Según confirmo este lunes la propia Nexos Comunicaciones
viene trabajando desde principios de este año con la iglesia católica del país y
fue esta misma empresa la responsable de definir los términos de un comunicado
emitido el miércoles pasado, cuando se supo que el obispo Tomás González, fue
interrogado por el juez Sergio Muñoz, en el marco de la investigación de la que
parece ser la peor red de pedofilia local, informó el diario El Mercurio.
Monseñor González es uno de los obispos que sobresalió en la defensa de los
derechos humanos durante la dictadura del General Augusto Pinochet. En esos
años, una parroquia de su diócesis en la región austral de Magallanes resultó
dañada por una bomba que fue instalada por un agente del régimen, informó la
Policía.
El obispo González dijo al juez que no conoce al empresario Claudio Spiniak, el
cabecilla de la red pedófila.
El breve interrogatorio de Muñoz al obispo ocupó grandes espacios en la prensa
coincidiendo, además, con la confirmación por un tribunal de apelaciones de una
sentencia dictada contra un cura acusado de abusar de al menos 10 niñas. En este
proceso, la Iglesia Católica fue condenada a pagar de manera solidaria con el
cura condenado una indemnización equivalente a unos 157 mil dólares.
La iglesia no acepta la condena solidaria
La sentencia fue rechazada de inmediato por el Arzobispado, que argumenta que la
"dependencia de un sacerdote en la Iglesia Católica con su Obispo se da en el
plano pastoral y espiritual y no en lo civil, ya que delitos de esta naturaleza
cometidos por un adulto son de responsabilidad personal y no institucional"’.
No es de esta opinión el tribunal de apelaciones que en su fallo señala que las
iglesias "están sometidas al tratamiento legal, igual que cualquier persona
natural o jurídica en Chile", apreciando que "la sentencia de la jueza Rosa
María Pinto al condenar al Arzobispado de Santiago a pagar indemnización en
forma solidaria con el sacerdote condenado, actuó conforme a derecho’’.
Perdida de prestigio
La iglesia chilena afronta debido a estos casos a una importante perdida de
prestigio y de influencia en la sociedad, como lo confirmo que Una reciente
campaña contra el uso de una píldora anticonceptiva no consiguió los efectos
esperados. Según una encuesta realizada, más del 85% de los consultados dijo que
usaría la pastilla si la afectada era una familiar.
A esta situación deberá enfrentarse la asesora de imagen a fin de contrarrestar
estas acusaciones y recuperar la influencia que tenía la iglesia católica sobre
la sociedad chilena.
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