EUROPA PRESS - El presidente y fundador de la Campus
Party, Francisco Regageles, explicó que la organización del evento tuvo
conocimiento de los hechos el pasado viernes por la mañana, cuando un grupo de «campuseros»
les informó de que había unos 10 jóvenes «intercambiándose un vídeo» con
imágenes que habían sido digitalizadas en las que se sometía a vejaciones a una
persona que se encontraba «altamente ebria».
Regageles indicó que el agredido era una persona extranjera, si
bien no pudo precisar su nacionalidad, de unos 60 años, mientras que los jóvenes
procedían de Valencia y de otras ciudades españolas, apuntó.
Después de comprobar el contenido de la grabación, los responsables de la Campus
Party informaron a la Policía Nacional de lo sucedido y se procedió a expulsión
del evento informático de los implicados. Además, en el caso de los menores, se
pusieron en contacto con sus progenitores para que se hicieran cargo de ellos.
Los hechos ocurrieron durante la noche del miércoles en los alrededores del
Centro Comercial El Saler de Valencia, próximo al Museo de las Ciencias Príncipe
Felipe en la Ciudad de las Artes y las Ciencias, donde se celebraba el evento,
según precisó Regageles. Al parecer, los jóvenes se encontraban bebiendo alcohol
en la calle cuando vieron a «una persona que parece que era extranjera» y que se
encontraba ebria y «dando tumbos» por la vía pública, explicó el responsable de
la Campus Party. Las imágenes grabadas muestran como los jóvenes «se ríen de él,
le sacan fotos y le humillan», relató.
Haciendo «botellón»
Regageles precisó que en el vídeo, de alrededor de un cuarto de hora de
duración, en ningún momento se muestran agresiones físicas. «Ni le empujan ni le
pegan ni nada por el estilo; son vejaciones», recalcó. «En el vídeo se ve a un
grupo de chavales bebiendo, haciendo "botellón", y a este señor que va dando
tumbos, levantándose y calléndose, y empiezan a jugar con él, a reirse, a darle
de beber y hacerse fotos», explicó. Además, afirmó que desconoce si el vídeo se
presenta con algún título «pues se trata de un archivo al que cada uno le puede
poner el nombre que quiera».
Los organizadores del encuentro consideraron estos hechos «inapropiados» por lo
que decidieron ese mismo viernes expulsar a los diez jóvenes y poner en
conocimiento de la policía lo sucedido. El vídeo se encuentra en estos momentos
en manos de los agentes, que se desplazaron hasta el lugar de celebración del
evento una vez fueron alertados de los hechos por los responsables de la Campus
Party. Regagales señaló que ahora «es la policía quien tiene que decidir si lo
sucedido es constitutivo de delito o no» e iniciar los trámites legales
oportunos.
Además, sobre la posible difusión del vídeo fuera de los límites de la Campus
Party, recalcó que eso «es imposible de saber». El responsable del encuentro
remarcó que fueron los propios «campuseros» «quienes pusieron en conocimiento de
la organización estos hechos tan inapropiados» y recalcó que aunque fue un
suceso «que ocurrió fuera del evento de la Campus Party nosotros decidimos
expulsarlos por comportamiento inapropiado».
Destacó que en la noche del mismo viernes, cuando se comunicó por megafonía la
decisión de la expulsión, «hubo una ovación enorme en la carpa» que acogía a los
«campuseros», lo que refleja el civismo y el gran ambiente de la gente». Al
respecto, la organización de la Campus Party insistió, a través de un
comunicado, en «el extraordinario civismo con el que se ha desarrollado este
evento, en el que han participado 4.500 jóvenes» y recalcó que fueron los
propios campuseros «los que notificaron lo sucedido y cooperaron con la
organización para identificar y expulsar a los responsables». Por su parte,
fuentes policiales confirmaron que se ha abierto una investigación sobre los
hechos, si bien no precisaron más detalles al respecto.
|