Agencias - Un fallo humano, un virus informático de origen desconocido y problemas de compatibilidad de mensajes procedentes de otros operadores son las tres hipótesis sobre las que trabajan los técnicos, informó hoy la compañía.

Los daños, que afectaron a una decena de centrales telefónicas, no se debían a un problema físico de líneas, sino informático.

Las centrales afectadas estaban saturadas por mensajes erróneos, con lo que no podían hacer frente a las llamadas.

El problema se resolvió el domingo por la noche gracias a un parche ideado por los informáticos y que se aplicó a todos los conmutadores, no sólo los que habían tenido problemas.

Entre los afectados por la avería figuran los servicios de emergencia, la policía y los bomberos, pero como la red de telefonía móvil funcionaba con normalidad, pudieron operar.