Agencias- El presidente George W. Bush y su contrincante
demócrata, John Kerry, se disputaban el miércoles de madrugada voto a voto en
Ohio y Iowa, estados claves que podrían retrasar el veredicto final de las
elecciones estadounidenses.
Kerry necesita ganar Ohio para mantener vivas sus escasas opciones de
victoria. Para Bush, que ha superado en más de tres millones de votos al
demócrata, Ohio supondría la reelección.
Según las estadísticas de otras elecciones, hasta ahora ningún republicano ha
llegado a la Casa Blanca sin haber ganado Ohio, Estado que otorga 20 votos
electorales. En las elecciones de 2000, Bush venció al entonces vicepresidente
Al Gore con una diferencia de cuatro puntos porcentuales.
Dos cadenas de televisión indicaron que Bush había ganado en
Ohio, lo que le daría prácticamente la victoria, pero otras tres cadenas dijeron
que aún no se podía definir a un triunfador en ese estado.
Asimismo, miembros de la campaña de Kerry dijeron que no reconocerían la
victoria del presidente en Ohio hasta que se contaran todos los votos, incluidos
los enviados por correo.
Si no se cuenta los 20 votos electorales que da Ohio, Bush habría ganado 27
estados con 249 votos electorales y Kerry 19 estados con 242. Para ganar la Casa
Blanca se necesitan 270 votos. Información de última hora amplia ya la ventaja a
254 por 242
Sin Ohio, Kerry tendría que ganar Nevada - un estado en el que Bush triunfó en
el 2000 -, además de los estados donde el ex candidato presidencial demócrata Al
Gore triunfó en el 2000 para lograr un empate de Publicidad
269-269.
Esto llevaría la contienda electoral al Congreso de Estados Unidos, dominado por
la mayoría republicana, donde es casi seguro que Bush sería el triunfador.
En todo el país se registró un gran número de votantes y pocos problemas durante
los comicios que ponen fin a una candente campaña en la que Bush y Kerry
intercambiaron duras críticas sobre temas como la situación en Irak, la guerra
contra el terrorismo y la economía nacional.
La jefa de campaña de Kerry, Mary Beth Cahill, dijo en un comunicado: "El
recuento de los votos en Ohio aún no ha terminado. Hay más de 250.000 votos que
contar. Creemos que cuando los cuenten, John Kerry ganará Ohio".
Un número desconocido de esos votos proceden de papeletas provisionales emitidas
por votantes que tuvieron problemas con sus documentos de votación. El
secretario de Estado de Ohio, Ken Blackwell, dijo que podrían tardarse al menos
11 días para contabilizar dichos votos.
"Si el número de votos que conforma la diferencia entre ambos candidatos es
inferior al número de papeletas provisionales, entonces diría a todos que
respiren profundamente y se relajen, porque no vamos a comenzar a contar esos
votos hasta 11 días después de las elecciones", dijo a la CNN.
Por otra parte, el compañero de campaña de Kerry, el senador John Edwards, dijo
en la madrugada del miércoles que pelearían por cada voto. "Podemos esperar una
noche más por la victoria", subrayó.
Se había pronosticado que Bush ganaría Florida, donde su hermano Jeb, el
gobernador del estado, dio un gran impulso en su campaña de reelección, lo que
le valió los 27 votos electorales de dicho estado.
Además de elegir gobernadores en 11 estados, los votantes también decidieron qué
partido político se alzaría con el control del Congreso. Los republicanos
resultaron los vencedores tanto en el Senado como en la Cámara de
Representantes.
Los precios del petróleo subieron bruscamente ante las especulaciones de que
Bush sería reelegido.
Bush, quien se encontraba en la Casa Blanca observando los resultados con su
familia y amigos - incluido su padre, el ex presidente George Bush - dijo que se
sentía optimista.
"Somos optimistas, muchas gracias", dijo a periodistas. "Creo que ganaré".
|