Las acciones de Google, el buscador más utilizado de Internet,
cayeron ayer un 6,67%, hasta 172,54 dólares (133 euros), el motivo la
incertidumbre ante la posible venta de acciones por parte de los empleados |
|
Noticias
relacionadas |
|
|
|
¿El motivo? Los empleados de la compañía podían poner a la venta 39,1
millones de títulos que poseen, tras finalizar el plazo durante el que no podían
venderlos. Esta cantidad de acciones casi duplica la cifra que cotiza en bolsa
(27,2 millones de títulos), lo que podría presionar a la baja el precio de los
títulos. Google salió al parqué el pasado 19 de agosto, culminando así la oferta
pública de venta de acciones más esperada del año, pero también la más
enrevesada.
La historia empezó con un complicado sistema de subasta holandés para determinar
el número y el precio de las acciones que saldrían al parqué, relegando la labor
de los bancos de inversión y acercando el sistema de colocación a los pequeños
inversores. La confusión se hizo mayor cuando Google, presionado por los
inversores que consideraban elevado el precio de los títulos, se vio obligado a
rebajar el precio orientativo de su OPV –fijado entre 108 y 135 dólares–, hasta
una horquilla de 85 y 95 dólares.
El desconcierto aumentó cuando la compañía decidió restringir la OPV sólo a
inversores estadounidenses.A todos estos problemas se sumó una investigación del
regulador bursátil estadounidense (SEC, en sus siglas en inglés), por la posible
entrega irregular de acciones a los empleados entre 2001 y 2004. Y la entrevista
que los fundadores, Sergey Brin y Larry Page, concedieron a Playboy, rompiendo
el silencio al que obliga la normativa bursátil a los ejecutivos de las empresas
que están en proceso de salida a bolsa, situó a Google en el ojo del huracán.
Ahora, casi tres meses después de la esperada salida a bolsa, Google vale un
103% más que aquel 19 de agosto, alcanzando una capitalización bursátil de
47.177,9 millones de dólares, una cifra que está 3.333 millones por debajo de la
de su rival Yahoo!. |