Un equipo de la Universidad de Glamorgan, en el Reino Unido,
analizó más de un centenar de viejos ordenadores, comprados en mercados de
segunda mano o a través de internet, y descubrieron que más de la mitad de sus
discos duros contenían información personal.
Entre los datos almacenados había números de la seguridad
social, pruebas de una aventura extramatrimonial e información biográfica muy
detallada sobre menores, informa hoy, jueves, el diario "The Times".
Entre los propietarios originales de los ordenadores
figuraban universidades, empresas multinacionales y una escuela primaria, todos
los cuales demostraron estar en violación de la ley británica sobre protección
de datos, que obliga a eliminar oportunamente las informaciones "sensibles".
Los discos duros de los ordenadores utilizados por empleados
de varias universidades como la de Hull o Southampton contenían detalles sobre
portales de internet especializados en material pornográfico visitados
regularmente por aquellos.
La compañía estadounidense Monsanto, especializada en la
producción de plantas genéticamente modificadas, ha decidido iniciar por su
parte una investigación después de que en uno de los discos duros se
encontrasen detalles sobre sus trabajos secretos en ese campo.
El método más seguro para impedir que datos no deseados
lleguen a manos ajenas es destruir físicamente con un martillo el ordenador que
ya no sirve, asegura el periódico.