Agencias - Ebbers, de 63 años, también fue declarado culpable de conspiración
y de presentar documentos falsos a los reguladores. El ex presidente se enfrenta
a una condena de 85 años de prisión. La sentencia se llevará a cabo el 13 de
junio.
Bernard Ebbers, que trabajó como guardia de seguridad, entrenador de baloncesto
y repartidor de leche antes de entrar al negocio de las telecomunicaciones,
permaneció sentado con las manos cruzadas durante la lectura del veredicto y no
mostró ninguna reacción, aunque se volvió a abrazar a su mujer, que estaba
llorando.
El jurado de Manhattan entregó su veredicto tras seis semanas de un juicio que
sirvió para determinar si Ebbers dirigió el fraude en WorldCom, la compañía de
comunicaciones a larga distancia que él construyó partiendo de una pequeña
empresa en Mississippi.
Ebbers negó en repetidas ocasiones los cargos, alegando que ignoraba el fraude y
culpando a su ex mano derecha y jefe financiero, Scott Sullivan.
El abogado de Ebbers dijo después del veredicto que apelaría.
"La lucha continuará", dijo Reid Weingarten. Cuando fue preguntado sobre la
respuesta de su cliente ante el veredicto, Weingarten dijo "Estoy seguro de que
está desolado".
Weingarten dijo que el caso estaba "lleno de dudas razonables". "Estamos
profundamente en desacuerdo con el veredicto", dijo.
Ebbers era uno de los seis ex ejecutivos de la compañía acusados después de que
el fraude saliese a la luz en 2002.
Cinco de los ejecutivos se declararon culpables, entre ellos Sullivan.
El testimonio de Sullivan fue clave para establecer una relación directa entre
Ebbers y el fraude.
Sullivan testificó que él advirtió que Ebbers era el único camino por el que la
compañía podía encontrar la protección necesaria para realizar "ajustes"
impropios" en los informes financieros.
Ebbers negó haber conocido los reajustes, diciendo a los miembros del jurado que
él se concentraba en la estrategia y dejaba los detalles contables y las
decisiones en manos del jefe financiero.
El veredicto del jurado llegó en la segunda semana de deliberaciones, después de
demandar una copia de los testimonios de Ebbers y Sullivan así como una gran
cantidad de pruebas incluidas en el juicio. |