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Según el estudio llevado a cabo por Visa Europa a través de ACNielsen
International Research sobre los Hábitos de pago y gestión financiera de las
pequeñas y medianas empresas españolas, los aspectos más valorados por las
empresas son la facilidad, rapidez y seguridad en los pagos además del máximo
control de gastos y la reducción del trabajo administrativo y contable. Todas
estas ventajas pueden conseguirse mediante el pago con tarjetas de empresa, con
el beneficio añadido de tener todos los pagos unificados en un único sistema.
Sin embargo, los principales medios de pago en las pequeñas y medianas empresas
españolas son los cargos en cuenta (73%) frente al 13% que utiliza los pagos
con tarjetas de empresa y el 9% que utiliza tarjetas personales
Según Luis García, director general de Visa Europa para España “en las pymes de
nuestro país observamos una tendencia a considerar las tarjetas como algo que
se usa “sólo en caso de emergencia”. Sin embargo, las tarjetas Visa de Empresa,
han sido diseñadas para adaptarse a sus necesidades y ofrecen ventajas
concretas como el control de los gastos mediante extractos mensuales, la
seguridad frente al efectivo, la posibilidad de aplazar los pagos, la
suscripción de programas de descuento con proveedores y la reducción del
esfuerzo de tramitación y control y en consecuencia los costes de
administración de las empresas”.
“Las compañías cada vez son más concientes de ello, y de hecho, durante el año
2004, las tarjetas Visa de Empresa en España han registrado un incremento del
18.3% lo que supone un crecimiento sin precedentes”, continúa García.
A pesar de ello, el cargo en cuenta es el método de pago más habitualmente
empleado por las empresas estudiadas y supone en torno a 145.000 millones de
euros, lo que representa aproximadamente el 73% del valor total de los gastos.
El cargo a cuenta es especialmente valorado para los pagos de alto importe como
materias primas, seguros o la contratación de servicios profesionales y cuando
se trata de gastos conocidos o esperados a través de proveedores habituales.
Por su parte, el pago en metálico es el sistema de pago mayoritario para gastos
de bajo importe como envíos postales, mantenimiento y reparaciones, suministro
de oficinas, carburante, y viajes y gastos de representación y representa el
39% del valor total de gastos. Los pagos en metálico son especialmente
valorados por su bajo coste y rapidez.
El 39% de las pymes utiliza las transferencias bancarias como método de pago.
Este sistema representa el 42% del valor total de gastos y supone unos 85.000
millones de euros anuales.
Los cheques son el cuarto método de pago más utilizado con un 28% del valor
total de gastos y generando un movimiento de en torno a 30.000 millones de
euros.
Tanto el metálico como los cheques son métodos de pago que se podrían remplazar
fácilmente por las tarjetas de pago pues sus beneficios son también comunes a
las tarjetas.
Gestión FinancieraEl estudio realizado por Visa también analiza
algunos aspectos de la gestión financiera de las pequeñas y medianas empresas
españolas.
La necesidad de separar de las cuentas personales de las de la empresa es
evidente para la mayoría de las pymes con el fin de mantener un buen registro
de ingresos y gastos que permitan llevar un adecuado control de las finanzas,
así como para facilitar el pago de facturas y recibos. El 81% tienen una cuenta
separada para los gastos de empresa y 78% tienen una cuenta sólo para la
empresa.
En este mismo sentido, un tercio de los encuestados opina que es importante
separar los gastos de la empresa de los gastos personales utilizando una
tarjeta de empresa como medio de pago. A pesar de ello, todavía solamente un 9%
de las pymes utiliza la tarjeta personal para pagar los gastos de la empresa.
Otro de los aspectos analizados es la actitud ante la posibilidad de recurrir a
capital ajeno para financiar sus gastos. En este sentido, las pymes españolas
prefieren no tener que utilizar préstamos o sufrir descubiertos en cuenta como
lo demuestra el hecho de que solo el 17% de las pymes ha utilizado el
descubierto en cuenta en el pasado año. Además solamente el 14% de las pymes ha
pedido un préstamo para la empresa en el año pasado y la mayoría de ellas solo
lo ha hecho en una ocasión. Sin embargo, el 51% de los que lo hicieron el año
pasado consideran que es una práctica normal en el desarrollo de sus negocios.
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