Dicho sistema es una de las propuestas para la mejora del transporte aéreo con vistas al año 2020, incluida en una Agenda de Investigación Estratégica para esta industria de la UE presentada hoy en Bruselas por el Consejo Consultivo para la Investigación Aeronáutica en Europa (Acare), integrado por 39 miembros expertos del sector.

Entre otras medidas sugeridas por Acare para evitar secuestros aéreos y ataques terroristas contra o con aviones se plantea el diseño de cabinas que cuenten con sistemas que faciliten la neutralización de terroristas o sospechosos de serlo.

En el documento se proponen también el desarrollo de medidas tales como mejorar la seguridad de la cabina de pilotaje con controladores biométricos que imposibiliten que otra persona se haga con los mandos del aparato.

También se sugieren otros dispositivos que alerten de posibles desviaciones del plan de vuelo no anunciadas y de que protejan a los aparatos de misiles de corto alcance, de los que podrían ser blanco durante operaciones de despegue y aterrizaje.

Otro capítulo en el que se subraya una especial importancia en el desarrollo del sector, que duplicará su actividad en los próximos quince años, es el medioambiental, ya que entre los objetivos de cara a 2020 del sector en la UE figura reducir en un 50% las tasas de emisiones de CO2 por pasajero y kilómetro.

Para lograrlo, se prevén distintas actuaciones, entre ellas el diseño de reactores más eficientes -como los de la firma británica Rolls Royce que equipa con el modelo Trent a buena parte de los Airbus-, la reducción de las distancias entre las terminales aeroportuarias y las pistas de aterrizaje o despegue.

La agenda del Acare sugiere ahondar en la investigación de nuevos combustibles -como el hidrógeno líquido, los biocombustibles o los sintéticos- y los sistemas de producción -como las células- y diseñar reactores más silenciosos para reducir las molestias a los vecinos de zonas aeroportuarias en un 50% con respecto a los niveles actuales.

De los actuales 3,1 millones de personas empleadas en el sector, la agenda del Acare prevé que se alcancen entre 5 y 7 millones en el año 2020 y, según la Comisión Europea el tráfico aéreo para entonces se habrá duplicado, con lo que su aportación al Producto Interior Bruto rondará el 13%, según señala en un comunicado.