El presidente de Telefónica Móviles, Antonio Viana-Baptista, afirmó ayer ante su junta de accionistas que uno de los objetivos de la empresa para este años es rebajar el precio medio de los teléfonos celulares desde los 78 euros que costaban en el 2004 hasta los 70 euros.


Viana-Baptista anunció que durante este año la firma adquirirá 40 millones de terminales, lo que supone el 6% del mercado mundial. En este sentido, señaló que la compañía ha establecido un modelo centralizado de compras para sus 15 divisiones nacionales con el objetivo de tener una posición negociadora más ventajosa con los fabricantes.

El presidente de la compañía reiteró que su compromiso de alcanzar a finales de 2008 más de 125 millones de clientes, lo que implica incorporar 40 millones en cuatro años.