Para paliar este problema, impropio de uno de los países europeos donde más
desarrollada está la telefonía celular, el Gobierno firmó ayer con Telefónica
Móviles y Amena este plan, que prevé unas inversiones de 833,8 millones de
euros, de los que 531,8 millones se destinarán a dotar de cobertura de este
servicio a las zonas rurales desatendidas, enclaves estratégicos (centrales
nucleares, petroquímicas) y vías de comunicación como autopistas y líneas
ferroviarias de alta velocidad. |