Esta compra, que ha sido comunicada a la Comisión Federal de Competencia
mexicana (Cofeco), supone a Telefónica Móviles un desembolso de 177 millones de
euros. Esta operación, articulada por Telefónica Móviles se estructura mediante
un canje de acciones de Telefónica Móviles México S.A. por acciones de
Telefónica S.A., lo que permite que Alejandro Burillo pase a ser accionista de
la compañía matriz del Grupo Telefónica.
La operación no supone un incremento material de la deuda de Telefónica Móviles
ya que, de acuerdo con las Normas Internacionales de Información Financiera, el
precio mínimo de ejercicio de la opción de venta del Grupo Burillo se encontraba
contabilizada como deuda, y a 30 de noviembre de 2005, computando los intereses
devengados hasta dicha fecha, alcanzaba un valor de 153 millones de euros.
La adquisición del 8% del capital de Telefónica Móviles México permite a
Telefónica Móviles incrementar su participación en una compañía con un alto
potencial de crecimiento y con una importante capacidad de generación de caja a
medio plazo, adelantándose a los plazos establecidos en el acuerdo entre
accionistas sobre la adquisición del 8% de Telefónica Móviles México. Este
acuerdo fijaba el primer plazo para el ejercicio de sus opciones de compra en el
tercer trimestre de 2007 para el 4% del capital y en el tercer trimestre de 2008
para el restante 4% (o el 8% en el caso de no ejercicio parcial en 2007).
El mercado mexicano de telefonía móvil, con un nivel de penetración de cerca del
43% a cierre de 2005, muestra un importante potencial de crecimiento, ya que el
consenso de las estimaciones del mercado apuntan a que tendrá una penetración
superior al 60% a finales de 2008, lo que supone cerca de 70 millones de
clientes. Las mismas estimaciones señalan que el mercado mexicano podrá generar
unos ingresos por servicios superiores a los 10.000 millones de euros en el
ejercicio de 2008 |