Mundo Digital

 

Internet impulsa antigua artesanía de madera de Belén
 
Anton Shomali es capaz de tallar una figura de madera del José bíblico en tres horas y no necesita un modelo para copiar, informa la agencia AP


Noticias relacionadas
 

Agencias - "Soy feliz cuando invento algo en mi cabeza", dice el tallador de 63 años.

En los últimos cinco años, Shomali ha tenido pocas razones para ser feliz. El conflicto entre israelíes y palestinos diezmó el vital sector turístico de Belén y privó de clientes a los talladores como Shomali.

Pero en esta Navidad en Belén, que la tradición cristiana considera el pueblo natal de Jesús, la centenaria artesanía revive gracias a una combinación feliz de la tradición, la tecnología y, en el caso de Shomali, la incursión en los mercados extranjeros.

Dos hermanos de Shomali han empezado a vender las tallas de madera de olivo _Jesús, María, José, los Reyes Magos, figuras para pesebres_ en centros comerciales de Nueva York, California y Luisiana, y en los últimos dos años su producción se ha duplicado con creces.

"Allá les gusta este trabajo porque viene de Tierra Santa", dijo Shomali. "Jesús bendijo el olivo".

La internet es otra bendición para los artesanos de la madera de Belén, que realizan estas tallas desde el siglo IV, pero casi habían perdido su medio de vida debido al conflicto que prácticamente clausuró el pueblo.

Johny Handal cerró su centenario negocio de tallas durante ocho meses en 2002, pero lo reabrió cuando su hijo empezó a recibir pedidos a través de la web.

Los productos vendidos a través de la internet obtienen precios tres veces más altos que los del mercado local, según los artesanos.

Tras el desastre de la primavera de 2002, cuando varios milicianos palestinos se refugiaron durante 39 días en la Iglesia de la Natividad, lo cual provocó un violento asedio israelí, los peregrinos empiezan a regresar a Belén: para esta Navidad se esperan 30.000, comparado con 2.000 hace dos años.

Este año, los artesanos de Belén han recibido un beneficio de una fuente inesperada: madera de olivo barata de la construcción del controvertido muro israelí en torno de Cisjordania.

Miles de olivos han sido derribados para dejar lugar al muro, lo que ha generado una abundancia de madera, cuyo precio ha caído de 260 dólares a 195 dólares la tonelada. Pero no es motivo de celebración. El muro separa a mucha gente de sus tierras y afea el paisaje que atrae a los turistas.

Handal dijo que tuvo que librar una batalla legal con el ejército israelí para que le entregaran sus árboles derribados. Y cuando los consiguió, se negó a usarlos para las tallas, porque la madera obtenida así, dijo, no se podía usar para tallas sagradas.

"Finalmente usamos esa madera como leña", dijo.

Shomali, quien asegura que los israelíes lo han encarcelado y deportado por sus actividades, se mostró más práctico: le complace comprar la madera por menos precio.

La artesanía con madera de olivo llegó a Belén en el siglo IV con la construcción de la Iglesia de la Natividad, que se alza en torno de la gruta donde, según la tradición, nació Jesús. Los monjes enseñaron el oficio a los nativos, y ahora, muchos vecinos del lugar tallan la madera o comercian las estatuillas.

Hay unos 300 talleres que emplean entre 5 y 15 personas.

Shomali se enorgullece de la presencia de su familia en la aldea cristiana de Beit Sahour, en las afueras de Belén: allí se encuentra el campo donde la Biblia dice que los pastores recibieron la noticia del nacimiento de Jesús.

"Probablemente nosotros éramos los pastores cuando vino Jesús", dijo Shomali.

Hay unos 250.000 cristianos en Tierra Santa, pero sus números disminuyen debido a la emigración.

Para los que se quedaron, las iglesias occidentales han sido un salvavidas, al vincular a los artesanos de Belén con comerciantes estadounidenses y europeos.

"Les hemos dicho, no nos den de comer, dennos la oportunidad de trabajar", dijo Handal.

Shomali, que ejerce el oficio desde hace 42 años, dijo que los nuevos mercados le han dado nuevos ánimos y energía. Para hacer sus tallas usa un taladro del tamaño de un cepillo de dientes, una copiadora de moldes y una sierra eléctrica.

Con su taladro, Shomali realiza los últimos detalles de un bloque de madera de olivo que toma la forma de José. Su taller es un cuarto escasamente iluminado en un callejón de Beit Sahour donde cientos de estatuillas de Jesús, María y otros personajes bíblicos aguardan en los estantes el último toque del artista. La cara y el pelo de todos los trabajadores están blancos de aserrín.

"Si me lo piden, puedo hacer miles", dijo Shomali.


Enlaces relacionados
 
martes, 03 enero 2006

Noticiasdot.com
Edita : Noticias Digitales SL - Editor ejecutivo y Director:  Angel Cortés


Noticiasdot.com Stilo Cine Viajes Gadgetmania
Empleo Más 18 RSS Suscripciones  

Direcciones de correo electrónico: Redacción - Información - Anunciate en Noticiasdot.com: Publicidad - ¿Quienes somos?

Con el patrocinio de FRANQUICIA LASER GAME QUASAR ELITE Laser Gam