Nos enteramos de la noticia a través de Mangas Verdes y el blog de Enrique
Dans, quienes reportan un artículo publicado por Boing Boing.
En dicho artículo se acusa a la parlamentaria Sam Bulte, de haber recibido
suculentas donaciones, enmascaradas en forma de esponsorizaciones y cenas,
procedentes de lobbys de presión en favor del endurecimiento de las actuales
leyes del copyright.
Según parece la parlamentaria admite la procedencia de dichas donaciones aunque
declara ser totalmente transparente justificando las donaciones alegando que
dichas personas "la sostienen económicamente debido a su postura con respecto
al copyright".
Su postura consiste en impulsar en Canadá la ley C60, una reforma legislativa
que pretende endurecer las leyes del copyright. |