Angel Cortés, el director de este diario digital, esta convencido de que el buscador europeo no tiene ningún futuro. "La historia reciente de internet esta llena de proyectos fracasados nacidos con toda la buena intención del mundo".

Cortés, cree que la comunidad internauta ha adoptado "Google" como algo suyo y que este es el gran secreto de su éxito, creyendo " que en este terreno los gobierno europeos bien poco podrán hacer para llevar a estos usuarios a su terreno.". Finalmente cree que esta iniciativa solamente servirá para engrosar "las arcas de empresas (semi-estatales), universidades y consultoras y finalmente el producto (si llega a concretarse) pasará a mayor gloria en poco tiempo".

Tampoco lo ve nada claro José A. Millán quien cree que la iniciativa tendría que haber surgido desde el sector privado, mediante inversiones de capital-riesgo, en lugar de ser promovido por las Administraciones públicas.

Además, subraya que Google no supone ningún peligro para la cultura europea, como estiman algunos dirigentes políticos, y que solamente muestra la realidad. "A mí no me interesa que Quaero ponga los resultados europeos por delante de los demás".


Para Antonio José Chinchetru de Libertad Digital, el futuro buscador es un desacierto en todos sus aspectos. "Ya el nombre elegido, además de hortera, es poco acertado: Quaero. Será latín, y por tanto europeo, pero resulta difícil de recordar para millones de europeos cuyos conocimientos de la lengua del Imperio Romano oscilan entre escasos e inexistentes. Es una cursilada con pretensiones de "alta cultura" y clasicismo ajena a la modernidad que implica la Red".

Chinchetru finaliza diciendo que " Google no triunfa por la nacionalidad de la empresa o sus creadores, es el número uno por el simple hecho de que da a todos los internautas del mundo lo que buscan".

Pepe Cervera, explica en 20minutos.es que "Crear un buscador para defender la multiculturalidad es una completa estupidez. Si el flamante eurobuscador privilegia los resultados europeos continentales frente a los anglosajones estará corrompiendo las búsquedas.

En lugar de localizar lo que el cliente busca encontrará lo que los burócratas o las multinacionales de Europa consideren mejor. ¿Quién va a utilizar un buscador que despista? Si el problema es la lengua, Google ya dispone de las herramientas para buscar en decenas de idiomas diferentes. Y si no privilegia resultados ni idiomas... ¿en qué será diferente (por no decir mejor) que Google?"

En Microsiervos presentan la crítica al buscador con un divertido titular: "Quaero y no puedo"

Explicando que "Para Jacques Chirac este proyecto es «el Airbus digital» pero la verdad es que me la comparación me parece poco afortunada. ¿Habría vendido Airbus un sólo avión si estos sólo volaran entre aeropuertos de países miembros del consorcio?

El proyecto se concede tres años de experiencia antes de evaluar la verosimilitud de sus expectativas, pero me da que de aquí a entonces no será más que una forma como otra de desperdiciar dinero público".

Finalizamos el repaso de las críticas hacía este nuevo buscador con una frase extraída de ALT1040, el weblog de Eduardo Arcos, quien al opinar sobre "Quaero",  "¿Cuántas veces hay que explicarle a la gente, gobiernos, empresas y corporaciones que el internet no se puede controlar?


A favor

Es difícil en la red española (e incluso europea) encontrar opiniones favorables al buscador europeo que no provengan de firmas interesadas en su desarrollo.

Uno de los pocos lugares que muestra públicamente su apoyo al proyecto es "telendro.es". El sitio especializado en buscadores nos presenta su apoyo bajo el titulo de ¡ Pues yo si que Quaero ! explicando "que prefiere un buscador censurando a la europea que a la estadounidense, que apoye, además, a la cultura europea y que se lleve toda la pasta para el viejo continente. Finaliza diciendo que cuanta más competencia mejor y si desde Europa se puede conseguir la tecnología para un buscador competitivo, pues adelante.

En cuanto a expertos del mundo offline y representando a la administración pública es interesante la opinión de Víctor Izquierdo, al que le parece "una iniciativa interesante", afirmando que, a pesar de que se trate de un proyecto franco-alemán, sería deseable que se abra a la cooperación de otros agentes de la industria europea. El responsable del Gobierno español en materia de Telecomunicaciones cree que va a ser muy difícil competir con Google, aunque no imposible.