Agencias - Para la mayoría de los agasajados, el banquete fue nada menos que un ensayo general de lo que será la gran noche del Oscar, el 5 de marzo, dentro de menos de un mes. Y en general, estuvieron en su mejor comportamiento, salvo algunas bromas de corte político, sobre todo de George Clooney, quien hizo alusión al reciente incidente del vicepresidente Dick Cheney.

Clooney, quien aventaja a los demás con su triple nominación (como Mejor Actor de Reparto por Syriana, Mejor Director y Mejor Guionista por Good Night, and Good Luck), bromeó sobre el incidente en el que Cheney disparó por error a un cazador en Texas, diciendo "traeré como pareja a Dick Cheney... fue muy amable al invitarme a cazar y yo le respondí invitándolo al Oscar". Las dos películas por las que está nominado tienen un fuerte tinte político.

El banquete sirvió también para dar rienda suelta a las fantasías de los candidatos. Terrence Howard, quien accede a su primera nominación por Hustle & Flow y va último en las apuestas por Mejor Actor, afirmó que "es la fantasía que hasta te da miedo pensar, pero que en secreto no te puedes sacar de la cabeza. Eres uno de los cinco y ¿qué pasaría si dijeran mi nombre?". El actor agregó sentirse "bienvenido al club" y sorprendido de compartir "la misma clase que Steven Spielberg".

La actriz Resse Witherspoon, nominada por su actuación en Walk the Line, comentó risueña que su hija de seis años disfruta coleccionando sus premios y jugando con ellos, que los atribuye a que "es la mejor mamá del mundo". Dos semanas antes, Reese ganó un premio del Sindicato de Actores. A la ceremonia acudirá acompañada de su esposo, el también actor Ryan Phillipe y con un vestido "cómodo y que me ajuste bien". La candidata Felicity Huffman (Transamerica) también irá con su esposo, William H. Macy, quien fuera nominado en 1997 y le recomendó "una ducha" para combatir el nerviosismo.

La más joven de las candidatas este año, Keira Knightley, de 20 años (Pride & Prejudice) aconsejó tratar de pasar la próxima ceremonia "lo mejor posible" y relató las bromas de su colega Johnny Depp, durante el actual rodaje de las secuelas de Pirates of the Caribbean: "Cada vez que hago una toma, me pregunta '¿es una toma digna de un Oscar?'".

William Hurt, nominado como Mejor Actor de Reparto por A History of Violence y quien ya tiene uno por El Beso de la Mujer Araña, indicó que aunque no anda haciendo alarde de sus galardones en casa, le molesta mucho que haya desaparecido uno de ellos. "Creo que fue en junio pasado", afirmó, "durante la mudanza". Hurt también bromeó con su colega George Clooney, dando a entender que éste se llevaría la estatuilla. Clooney insistió una y otra vez que era "realista y no espero la victoria".

Quienes la pasaron muy bien fueron los tortolitos Heath Ledger y Michelle Williams, ambos nominados por sus actuaciones en el drama Brokeback Mountain. No se separaron ni un momento y se fueron lo más pronto posible para estar con su hija recién nacida, Matilda. Los candidatos que no pudieron llevar a sus hijos, pues llevaron a sus padres, como Steven Spielberg o Charlize Theron.

El menú fue pato pequinés, rollitos de carne de Kyoto, canapés de salmón y sushi de caviar. Entre los nominados que no pudieron acudir al banquete, a causa de la tormenta de nieve que paralizó Nueva York, figuran Ang Lee, director de Brokeback Mountain, Rachel Weisz, actriz de The Constant Gardener, y Paul Giamatti, actor de Cinderella Man.