Sin embargo, en este caso, el final es distinto. Una mano misteriosa colgó el
primer episodio de 'Nobody's Watching' en YouTube y el eco de su éxito en la Red
ha llegado a los despachos que antes lo rechazaron. ¿Puede resucitar un producto
muerto con el apoyo de sus fans en Internet?
'Nobody's Watching' es una comedia de situación que, para la televisión, murió
hace año y medio. Su creador es Bill Lawrence, autor también de 'Spin City' y 'Scrubs'.
Él es el alma de la serie, que concibió con los guionistas Garrett Donovan y
Neil Goldman, que han trabajado en la serie animada de Fox 'Family Guy'.
Según publica la prensa estadounidense, el equipo se puso a trabajar sabiendo
que las 'sitcoms' que tanto éxito han cosechado en la televisión del país están
de capa caída por cuestiones de calidad. Así, dieron vida a una pareja de
personajes, Derek y Will, de Ohio, que piensan exactamente igual que sus
creadores, y que deciden hacer un programa de televisión a su manera. Una serie
dentro de una serie.
El estudio tras el proyecto es NBC Universal Television que, por tanto, tiene
derecho de tanteo sobre la serie. Sin embargo, Bill Lawrence ha declarado a 'The
New York Times' que el director de programación de la cadena, Kevin Reilly, le
dijo que le gustaba la frescura de la idea pero que no la consideraba apropiada
para la NBC.
Tras algún que otro casting por varias cadenas, la serie cayó en el olvido,
aunque no para sus autores. Hace unas semanas, Bill Lawrence supo que el piloto
había llegado a YouTube. Dice saber quién lo colocó en la Red pero no quiere
revelar su identidad. La primera semana de 'Nobody's Watching' en Internet
atrajó sólo a 4.000 espectadores. En la segunda, la cifra creció hasta las más
de 308.000 descargas del lunes por la mañana.
Incluso los ejecutivos de televisión le siguen la pista al fenómeno. Comedy
Central Channel y ABC se encuentran entre los nuevos interesados en el proyecto
y NBC quiere volverlo a ver.
Bill Lawrence cree que éste es exactamente el tipo de evolución que la
televisión necesita para romper sus arcaicos modelos de trabajo, incluidas las
presunciones sobre lo que la gente verá o no, basadas en estudios de mercado
realizados a pequeños grupos de personas.
(Agencias) |