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Napster, Grokster, Kazaa y ahora LimeWire.

Universal Music, Sony BMG, EMI y Warner Music, anunciaron ayer una demanda contra los creadores del programa de intercambio de ficheros "LimeWire" por permitir que los usuarios de este software descarguen e intercambien música (protegida por derechos de autor) libremente.

El grupo de discográficas exige el pago de una indemnización de 150.000 dólares en concepto de daños y prejuicios por cada una de las canciones que se han "infringido intencionadamente"

En la denuncia, las discográficas acusan a la empresa de software de beneficiarse de las descargas ilegales de su música, apuntando que "el alcance de la infracción es masivo".

Inisisten, además, que  "a pesar de los numerosos esfuerzos para involucrar a LimeWire, los propietarios de la web no han mostrado el interés suficiente en desarrollar un modelo de negocio legal".

La base de la denuncia se base en una resolución del Tribunal Supremo sobre Grockster en el que este alto organismo apuntó que los creadores de este tipo de programas eran en cierta medida culpables si no ponian todos los medios posibles para evitar que los usuarios los utilizasen para intercambiar obras o programas protegidas por  derechos de autor.