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Sin embargo, este dispositivo "símbolo" de toda una generación tiene su "cara oculta". Se encuentra en las fábricas chinas responsables de la producción de los millones de dispositivos esparcidos por todo el mundo.

Un diario británico, el Mail on Sunday denunciaba hace unas semanas que los empleados de una de estas fabricas eran obligados a trabajar turnos de 15 horas con un sueldo de apenas 50 dólares mensuales.

Código de Conducta

Apple presionado por la información periodística inició una investigación para comprobar si FoxConn (máximo proveedor de piezas para sus reproductores) cumplía con con el estricto "Código de Conducta de Proveedores" de la multinacional.

Apple explico que no encontró evidencia de trabajo forzado en esta empresa, pero que los empleados estaban trabajando por encimo de los limites en cuanto a horas y días laborados por semana.

"El equipo (investigador) revisó archivos de personal y las prácticas de contratación, y no encontró evidencia en absoluto del uso de mano de obra infantil o de cualquier forma de trabajo forzado", dijo Apple en un reporte en su sitio de internet que resume lo encontrado en su auditoría a la fábrica del reproductor de música iPod.

La investigación concluye que las jornadas laborales de esta fabrica eran "excesivas, ya que los trabajadores superan su dedicación máxima semanal de 60 horas con un día libre".

"No encontramos ejemplos de tiempo extra forzado", dijo Apple, tras reconocer excesos del 35% del tiempo en un período de siete meses y jornadas de seis días seguidos en un  25% del tiempo.

Finalmente, se encontraron en la empresa tres dormitorios donde los empleados se hospedan, supuestamente, en intérvalos mínimos.

Apple señaló que tiene "tolerancia cero en sus políticas ante cualquier caso que pueda ser considerado como abuso" y exigió al proveedor chino que aplicará de inmediato el "Código de conducta". Por su parte, FoxConn ha anunciado que remediará todas las fallas con el código laboral impuesto por la empresa estadounidense

No es un caso único

Lamentablemente esta situación, desvelada por el diario británico y que ha llevado a Apple a tomar cartas en el asunto no es un caso aislado.

Grandes proveedores del inmenso país asiático mantienen su competitividad aplicando una política laboral en el que los derechos de los empleados brillan por su ausencia y en el que los salarios se encuentran bajo los mínimos de supervivencia.