Softwares y hardwares hacen las veces de "Big Brother" (Gran
Hermano) e invaden la privacidad de los "sospechosos" de traición virtual, que
muchas veces es el comienzo para la infidelidad física de sus parejas.
Un sitio para los hombres víctimas de las infidelidad
propiciada por los chats (salas de diálogo) en Internet o sospechosos de serlo
fue creado por el estadounidense John La Sage, de 43 años, después de descubrir
la "ciber-traición" de su mujer.
En el sitio de La Sage, chatcheaters.com, se consiguen
softwares de espionaje a equipos domésticos, que monitorean programas comunes de
mensajería como ICQ y MSN, por un precio de entre 70 y 90 dólares.
En entrevista con el portal brasileño Ultimo Segundo, La Sage
dijo que "hice este sitio para ayudar a aquéllos que pasaron o pasan por mi
situación, y llamar la atención del mundo sobre el lado ` 'negro' del Internet
con la traición on line (en línea)".
En la página de La Sage también se promocionan links
(accesos) a páginas de fabricantes y comerciantes de cámaras, grabadoras
telefónicas e incluso del teclado utilizado y elementos que pueden ser
utilizados para el "espionaje doméstico ".
El sitio consiguió en un mes un millón de visita y ventas por
30 mil dólares y negó que sus productos sean "espionaje", calificándolos como
"ayuda " para dejar el "vicio" de los adictos a Internet y evitar la "ciber-traición".
El abogado brasileño Renato Ópice Blum aseguró que un sitio
como éste en Brasil carecería de fundamentos legales por violar las normas
existentes que protegen la privacidad.
El consejo del jurista es promover programas similares para
el control del acceso de los niños en Internet a páginas con contenido nocivo y
peligroso para ellos, sin que sea espionaje, sino una manera de educación.