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Angel Cortés - La planta española de Samsung fabrica teléfonos móviles y reproductores de DVD y se instaló en la localidad del Vallès Oriental hace 15 años. Hade dos años, una parte de la planta, que fabricaba televisiones y videos, se trasladó a Eslovaquia por la misma razón. Asimismo, en pleno auge de la telefonía móvil, Samsung apostaba fuertemente por la fabricación en el mercado español ampliando su fabrica al inaugurar una planta dedicada a la manufacturación de terminales GSM.

Esta fabrica fue inaugurada el 22 de junio del año 2000 contando el acto con la presencia de S. M. el Rey, Juan Carlos I, Jong Yong Yun, Presidente de Samsung Electronics, y del Presidente de la Generalitat, Jordi Pujol. En ese momento la firma coreana expreso que esta sería la base para su expansión en el mercado de terminales móviles, previéndose una facturación en torno a los 2 millones anuales durante su primer año y 7,5 millones para el año 2.002. Gran parte de esta producción, explicaron en su momento los directivos de la multinacional, serían destinados al mercado europeo mientras que el 20% estarían destinados al mercado español.

En ese mismo acto, Samsung informaba que la planta de producción de móviles contaría con 120 empleados con la intención de alcanzar los 1000 en el 2002.

Lo cierto es que de los 2 millones previstos, solamente fueron fabricados un millón en el primer año y que la multinacional rebajo sus pretensiones al apreciar analistas de primera línea que el mercado se enfrentaba a una saturación y una reducción en la venta de terminales en aquellas zonas (principalmente Europa) donde la telefonía móvil contaba con una importante penetración.

En septiembre del 2001, el consejero delegado de la multinacional, Alexandre Blasi, reafirmaba el compromiso con España aunque reconocía que el plan de inversiones de Samsung, con unas previsiones de 60,10 millones de euros (10.000 millones de pesetas) en tres años, había sido revisado, en parte por la negativa evolución del mercado de telefonía celular y que en esos momentos se situaban en 3,01 millones de euros (500 millones de pesetas anuales) en este momento, muy por debajo de lo que se preveía cuando se amplió la planta catalana para abordar la fabricación de terminales.

Sin embargo y a pesar de la crisis, en los últimos años Samsung ha sido uno de los vendedores "revelación" alcanzo la tercera posición del mercado y superando a Siemens y Sony Ericsson. Analista del mercado consideran que La firma podría cerrar este año con una cuota del 11% lo que significaría un nuevo crecimiento de casi dos puntos por cuarto año consecutivo

El cierre de la planta significará el, traslado de la producción de los productos electrónicos a Eslovaquia mientras que la manufacturación de los terminales móviles será asumido por la fábrica que la compañía tiene en China.

446 empleados en la calle

La reestructuración supone el cierre de su fábrica barcelonesa y también de la que posee en la localidad inglesa de Wynyard. Samsung había escogido Reino Unido y Catalunya para su implantación en Europa al considerar que eran las áreas más competitivas en su momento.

En España, esta reestructuración afectará a los 446 trabajadores de la fábrica de Palau-solità i Plegamans (población denominada antes Palau de Plegamans), quienes han sido informados esta mañana del cierre.

La empresa aseguró, no obstante, que las otras actividades y el resto de los empleados de la compañía en España, cerca de 150, no se verán afectados por estos cambios. La compañía posee oficinas comerciales y un almacén logístico en L´Hospitalet de Llobregat (Barcelona).

La multinacional justificó el cierre de las dos plantas por la necesidad de "mantener su competitividad, sobre todo en los productos más consolidados y de gama más baja". El presidente de la compañía, Sang Heung Shin, lamentó "tener que hacer este anuncio", y aseguró que antes de tomar esta decisión se "estudiaron todas las alternativas existentes".


Los sindicatos CC.OO. y UGT creen que el cierre es ilegal y no es un proceso irreversible


Los secretarios generales de Comisiones Obreras y UGT de Catalunya, Joan Coscubiela y José María Álvarez, respectivamente, afirmaron ayer que el cierre de la planta de Samsung no cumple la legislación vigente señalando que no se trata de un proceso irreversible.

Coscubiela indicó que "hay un anuncio de una decisión de la multinacional que requiere que la empresa dé explicaciones al comité de empresa y las instituciones". "No lo consideramos irreversible", agregó.

En este sentido, Coscubiela explicó que "en nuestro país no se puede despedir a 400 personas sin un acuerdo con los trabajadores o la autorización del Gobierno catalán", dos condiciones que "no se dan en la actualidad".

Responsabilidad civil

Por ello, Coscubiela pidió a Samsung "primero, que cumpla la ley y, segundo, que asuma su responsabilidad social como empresa en un país que seguramente le ha ayudado" en su proceso de ganancias, ya que la planta de Palau-solità i Plegamans obtiene beneficios.

El secretario general de CC.OO. de Catalunya destacó que, si bien es cierto que las empresas son "independientes y autónomas", "no es serio que actúen como hasta ahora, anunciando 24 horas antes un cierre como hecho irreversible y consumado".

Según Coscubiela, "es evidente que tenemos una situación complicada en la electrónica de consumo en Catalunya, España y Europa por una competitividad salvaje y un cierto intento de abandonar Europa". Por ello, consideró necesario convocar de forma "urgente" reuniones tripartitas con patronales, sindicatos y administración.

Psicosis

Por su parte, Alvarez dijo que "los trabajadores tienen representantes legales, Samsung conocía la ley cuando se instaló y actualmente no se está haciendo" el proceso de cierre según la normativa vigente. En su opinión, estos hechos crean una "psicosis que no tiene nada que ver con la realidad que tiene el país" y esperó que "se dirijan a los representantes de los trabajadores para explicar qué piensan hacer y por qué".

Alvarez insistió en que "no todos los casos son iguales" y que cada cierre o reducción de plantilla requiere estudios individualizados. Así, diferenció el anuncio de cierre de la planta de Samsung "que tiene beneficios" de otras compañías que arrastran pérdidas año tras año y apeló a la "responsabilidad social" de Samsung.

La huida de Philips

El anuncio de Samsung llega pocos días después de otra marcha significativa, la de Novalux (perteneciente al grupo Philips) que anuncio el cierre de su planta barcelonesa y el despido de sus cien empleados el próximo mes de junio. La compañía holandesa justifico esta decisión sobre la base de "la progresiva reducción de la demanda de los productos fabricados en La Garriga, su permanente reemplazo por otras gamas internacionales en los últimos años y la falta de competitividad en los mercados europeos, debido al pequeño tamaño de la planta".

Sin embargo en este caso, como en el de Samsung, el cierre no se produce para evitar perdidas sino para ganar más dinero llevando la producción a países del Este europeo con menores costes laborales y mayores "ayudas" por parte de las Administraciones.

Los sindicatos denuncian, además, que la multinacional holandesa ha destruido durante los últimos "15.000 puestos de trabajo" directos e indirectos en nuestro país.