Las compañías de telefonía móvil T-Mobile y Vodafone han sido expedientadas
por la Comisión Europea por imponer precios excesivos al resto de operadores
comunitarios en sus servicios de itinerancia internacional ("roaming", en
inglés). Vodafone ya fue expedientada por el mismo motivo el pasado mes de julio
junto con la empresa 02.
Según el Ejecutivo comunitario, las tarifas excesivas en los servicios de "roaming"
resultan perjudiciales para los consumidores porque las compañías telefónicas
las repercuten integralmente sobre las facturas de sus abonados cuando viajan
por la Unión Europea (UE), y neutralizan las ventajas que proporciona la
coordinación de las normas técnicas a nivel comunitario para estos servicios.
Las investigaciones llevadas a cabo por la Comisión desde 1997 y al menos hasta
2003 revelan que la compañía alemana T-Mobile y la británica Vodafone han estado
abusando de su posición dominante en el mercado de suministro de servicios al
por mayor de itinerancia internacional sobre su propia red. En concreto, el
abuso consistía en precios injustos y excesivos frente a los explotadores
europeos.
De confirmarse el caso, Bruselas podría aplicar una multa de hasta el 10% del
volumen de negocio de cada compañía, aunque hasta ahora las sanciones se han
limitado a un 2% o 3%.
La itinerancia internacional permite a los consumidores utilizar sus teléfonos
móviles fuera de su propio país, donde su operador nacional no tiene cobertura.
La Comisión critica que, hasta muy recientemente, la elección de la red
extranjera se realizaba de forma aleatoria. Este procedimiento impide, en su
opinión, que haya competencia y que bajen así los precios. La posible solución
pasaría por el establecimiento de "alianzas estratégicas paneuropeas", como la
que ya ha establecido Vodafone, que permiten ofrecer precios más bajos. |